martes, 31 de enero de 2017

Presente, pasado y futuro: ¿Dónde tienes la cabeza?

chica relajada

Uno de los principales objetivos del Mindfulness, clave también en la Terapia de Aceptación y Compromiso es el de ayudar a la persona a contactar con el momento presente. Es curioso con qué facilidad las personas nos desviamos de lo que estamos haciendo en un momento dado, yendo con el “piloto automático”, pensando en la conversación que tuvimos ayer con alguien, o en qué cenaremos esta noche. Otros ejemplos pueden tener mayor impacto emocional, como pensar en “por qué dije lo que dije”, o “por qué no hice lo que quería hacer”, o “qué pasará si me quedo sin trabajo…”.

Por las necesidades del entorno, nos hemos convertido en “resolvedores de problemas”, de modo que aun cuando no estén presentes; al conducir hacia el trabajo, por ejemplo, invertimos nuestro tiempo en prevenir situaciones futuras o analizar las pasadas tratando de sacar conclusiones.

Esta tendencia a pensar sobre el futuro tiene sentido dado que para la mayoría de personas es aversivo vivir en la incertidumbre, de modo que previendo escenarios y qué haremos en cada uno de ellos nos puede proporcionar cierto alivio al sentirnos preparados, con capacidad de controlar la situación y así reduciendo dicha incertidumbre. Que la incertidumbre o ambigüedad sean aversivas es algo totalmente adaptativo y funcional, pues aliviar este malestar hará que probablemente tengamos éxito en situaciones futuras similares.

Del mismo modo, darle vueltas a hechos pasados puede ser hasta cierto punto útil. Si nos fue mal una tarea, analizar los posibles motivos y qué cambiar de ella, nos permitirá sacar conclusiones para que no vuelva a suceder más adelante.

Desde un enfoque contextual-funcional, las cosas no son por sí mismas ni buenas ni malas, y dependen de si nos están sirviendo, funcionando, o no, y a qué coste. De este modo, si vemos que son habilidades que afortunadamente hemos desarrollado los humanos y nos han facilitado la vida en muchas ocasiones, es igualmente cierto que en ocasiones esta habilidad puede ser contraproducente, o tener un coste excesivo.

Ejemplos de ello pueden ser situaciones en que estás hablando con un amigo, un cliente del trabajo, un familiar… sin apenas implicación, con la cabeza en otro sitio. ¿Qué calidad de trato estás ofreciendo a los demás? ¿Es ese el tipo de amigo, trabajador, pariente que quieres ser? Puede suceder también al realizar algún tipo de actividad, degustando una sabrosa cena o visitando un nuevo lugar, ¿hasta qué punto estás disfrutando del momento, cuan rica es tu experiencia? 

A menudo, nos alejamos del momento presente con la finalidad de evitar el sufrimiento que el momento nos produce. Como la persona que aparta la mirada en una película de terror, quien se pellizca cuando le van a inyectar una vacuna, o el conferenciante que se imagina su audiencia desnuda para con ello reducir su malestar por hablar en público.

Como anunciábamos, las cosas no son buenas ni malas per sé, si no que dependen del contexto en que se dan, y lo conveniente es centrarse en si nos hacen la vida mejor o no. Quizás, aceptar el malestar de hablar en público (que no sea algo contra lo que luchar), y centrarse en el contenido y cómo captar la atención de los asistentes sea más efectivo que estar pendiente de los pensamientos o emociones que puedan venir, y tratar de reducirlos con algún tipo de técnica.

Siguiendo el ejemplo del conferenciante, es probable que al contactar con el momento presente, la persona vea aspectos positivos y agradables de realizar una buena exposición y observar que resulta interesante y provechosa para su audiencia. Será también más sensible, estando en el presente, a detectar qué aspectos causaron mayor o menor expectación, para poder mejorar en esta faceta.

En conclusión, los seres humanos tenemos grandes habilidades que nos permiten predecir, anticipar situaciones y mejorar en base a revivir momentos pasados o prever posibilidades futuras. La cuestión es que dicha habilidad en ocasiones puede ser contraproducente (estoy seguro que sabrás identificar algún ejemplo en tu vida), limitando nuestra capacidad de vivir el momento en su plenitud.

Una buena técnica para mejorar en este aspecto sería practicar el “volver al presente”, es decir, el darse cuenta de cuando uno lleva tiempo “colgado” en sus pensamientos, de manera no fructífera, para volver a lo que está haciendo. Un buen recurso para este aterrizaje al momento presente puede ser prestar atención a la respiración, o al contacto de los pies con el suelo, algo que siempre nos acompaña y se puede experimentar en el lugar en que sucede la vida, el aquí y ahora.

Photo Credit: Chica relajada via Shutterstock

La entrada Presente, pasado y futuro: ¿Dónde tienes la cabeza? aparece primero en Psicocode.



from Psicocode http://ift.tt/2kmAGGi
via IFTTT

domingo, 29 de enero de 2017

El embarazo modifica el cerebro, literalmente

Un estudio científico muestra cómo el embarazo modifica el cerebro, literalmente. Estos cambiamos permitirían dar una base orgánica a los cambios psíquicos que cualquiera percibe en una madre. Todos hemos percibido.

La entrada El embarazo modifica el cerebro, literalmente aparece primero en depsicologia.com.



from depsicologia.com http://ift.tt/2k7PPsM
via IFTTT

viernes, 27 de enero de 2017

Tecnofobia: Desde cajamarca hasta Black Mirror

black mirror

Desde que en 1532 Francisco Pizarro apresara a Atahualpa ha llovido mucho. Pero quién iba a decir que en cosa de solo 450 años la preocupación de la sociedad iba a pasar de la mejora de la rueda a las implicaciones de la realidad virtual sobre la educación de nuestros hijos en plena era digital.

La conquista de Cajamarca ha quedado inmortalizada en el tercer capítulo de Armas, Gérmenes y Acero, premio Pulitzer, del gran Jared Diamond. ¿Cómo llegó el bueno de Pizarro a derrocar a todo un imperio inca, con tan pocos hombres y a millas de una base de repuesto, comida y armamento? Fueron las armas y el acero, es decir, la tecnología; y los gérmenes, o la biología. Pero aquí entró en juego un aspecto clave, la psicología.

A Atahualpa le corroía una grave preocupación, tanto que no le dejaba dormir. Sus sacerdotes le habían vaticinado que su imperio caería en manos de un dios que vendría allende los mares, barbudo, de rostro pálido y de vestimenta reluciente. Cuando éste vio a los españoles y sus brillantes armaduras, concluyó que el vaticinio se había hecho realidad y rindió su ciudadela sin titubeos. Las armas, los gérmenes y el acero fueron la clave de la conquista de Perú.

Sin embargo, hoy en día sabemos que la tecnología es un arma de doble filo. Ahora existen conceptos nuevos como Armas de Destrucción Masiva. Si después de la II Guerra Mundial surgió el movimiento antinuclear, hoy en día hay una corriente que se manifiesta en contra del desarrollo vertiginoso de la tecnología. Además, ésta hace años que ha incluido una acepción más difusa, siendo utilizado por muchos prácticamente como sinónimo de “la red”. Concepto que algunos han extrapolado hasta incluir la idea de “información” en su conjunto.

Así se ha llegado al debate sobre los peligros de la nueva sociedad de la información. No hace tanto que Bowling for Columbine levantara ampollas entre muchos pedagogos que se manifestaron de forma vehemente contra los peligros de los videojuegos. Hoy en día hay formas nuevas para atentar contra los derechos humanos, como la difusión del terrorismo audiovisual o el bullying a través del whatsapp.

Los riesgos de la realidad virtual han quedado plasmados de forma magistral en la serie Black Mirror donde se muestra una sociedad hipertecnificada. Un lugar donde las personas viven puntuándose unas a otras a través de una aplicación móvil para pasar de una clase social a otra, que condiciona  interacciones basadas en la absoluta hipocresía. Una mujer que pierde a su marido en un accidente y se vuelve adicta a un programa informático que – mediante la recopilación de su huella digital- responde como lo haría él. 

O San Junípero, una ciudad ideal que muestra su lado oscuro cuando uno descubre que gran parte de sus habitantes están criando malvas hace tiempo, y que son, en realidad, fantasmas de antiguas conciencias que han decidido quedarse allí para siempre disfrutando de un momento vital congelado en el tiempo, en recuerdo de una época en la que fueron felices.

La calidad de estas historias reside en que, a pesar de todo, no son tan inverosímiles, sino que en múltiples aspectos nos resultan familiares. Es nuestra realidad cotidiana expandida hasta niveles delirantes. Hoy en día hay personas para las que las redes sociales se han convertido en un auténtico problema de salud mental. ¿Quién nos dice que no nos enamoraremos de un bot si pudiera simular a un ser humano a la perfección?.

Generalmente los artículos que he leído sobre los peligros de la tecnología de la información vienen del área de la educación, y alertan sobre una gran cantidad de cosas nocivas que pueden traer consigo: la violencia en el cine, la sobre-estimulación, la pérdida de la privacidad. He comprobado que muchas de las personas que se inclinan por ver el lado negativo de esta tecnología tienden a manifestarse también en contra del microondas, de los antibióticos, de la medicina tradicional y de la experimentación animal.

Aunque cada uno de estos temas parecen no tener relación, se puede reconocer en todos ellos un trasfondo común que Pinker denomina “el mito del Buen Salvaje”, para describir aquel pensamiento por el cual el ser humano nace bondadoso y es la sociedad la que lo corrompe. La tecnología parece haberse convertido en el nuevo Leviatán que tiene el poder de corromper la esencia de lo humano (sea lo que fuere esa esencia). Es el debate Nature vs Nurture en 2.0.

No quisiera decir este debate no tenga sentido: al contrario. Los riesgos que conlleva la tecnología merecen una reflexión profunda desde el conocimiento y el raciocinio. Sin embargo a menudo la defensa irracional de lo natural tiene implicaciones tan desfavorables como la defensa del uso de la tecnología sin miramientos. En un interesantísimo ciclo sobre pseudociencias realizado en el Ateneo Navarro, Alfonso Gámez destripaba los peligros de la falta de pensamiento crítico en la salud pública. Tal vez los defensores de las curas milagrosas que se niegan a vacunar a sus hijos no se den cuenta de que, si creen en esto, no tienen razones para no creer que el cuerno de rinoceronte potencia la fertilidad, y de que, quizá de manera indirecta, están potenciando la extinción de este bello animal.

Quizá algunos no vean la relación entre esta afirmación, “lo natural vs lo tecnológico” con la doctrina del Buen Salvaje, o  con la idea de que el cine actual crea seres violentos. Coincido con Pinker en que hay una profunda conexión entre estas ideas. Es el pensamiento de que hay una realidad externa que puede imponerse sobre algo que ya se halla en la mente infantil (y que por naturaleza es positiva y auténtica).

Conforme avance la genética es posible que descubramos que hay combinaciones de genes que predisponen a una persona a ser un asesino en serie. Este tipo de cosas nos produce una repulsión inmediata, ya que inclina a pensar en la estigmatización, la negación de nuestra libertad de elección y del poder positivo de la educación. Hay que recordar sin embargo, que la doctrina de la tábula rasa inicialmente desarrollada por Locke contra las ideas innatistas, acabó por producir una profunda estigmatización en generaciones de padres que se sintieron responsables de que sus hijos fueran autistas o esquizofrénicos. La conclusión es, como siempre, que las visiones unilaterales  llevan a resultados parciales, alejadas de la realidad.

Hace poco, Alfonso Gámez publicaba en Magonia una entrevista al biofísico Félix Goñi. Este es un extracto:

A.G: Si creemos que las ondas de telefonía son nocivas, ¿también deberíamos apagar la radio y la tele?

F.G: Por supuesto. (…) Si unas son dañinas, también lo son las otras (…).

A.G: ¿A qué achaca entonces el miedo de cierta gente a las ondas de telefonía y wifi?

F.G: (…) Es un fenómeno interesantísimo, subyugante, que una sociedad cada vez más dependiente de la ciencia y la tecnología desarrolle, al mismo tiempo, fobias inexplicables hacia la tecnología.

De forma paralela, ¿el cine actual fomenta la violencia?. Dicho de otra manera: ¿Las películas violentas fomentan la violencia? Si yo fuera innatista al 100% diría que no, si el niño que ve por ejemplo Narcos no tiene genes que predisponen a la violencia. Claro que sería una respuesta a posteriori, dando lugar a un argumento circular. Si fuera 100% empirista diría que sí, ya que su mente sería moldeable en un 100%.

La respuesta más realista sin embargo, con los conocimientos actuales desde la biología, las neurociencias y la psicología, sería un “depende”. Hay cine violento cuyo mensaje no es la violencia. Otra forma de decir lo mismo es que la violencia, al igual que la ternura o la compasión, forma parte del repertorio de las capacidades humanas adquiridas en su historia evolutiva. Que haya películas que venden violencia de forma gratuita, no es lo mismo que decir que el visionado con cierta frecuencia de escenas de violencia causen de forma necesaria la agresividad en la mente del niño.

Otro experimento natural. En Armas, Gérmenes y Acero, Jared Diamond narra el triste final de los moriori en las islas Chatham, a 800 kilómetros de Nueva Zelanda, a manos de los maoríes en diciembre de 1835. Los maoríes era un pueblo de agricultores, con una estructura jerárquica centralizada, con tecnología mucho más avanzada que los morioris, que eran cazadores-recolectores cuyas costumbres eran que acostumbraban a resolver las disputas de manera pacífica. Así, cuando entraron en colisión fueron los maoríes quienes exterminaron a los morioris y no a la inversa.

Por supuesto nada dice Diamond sobre la inclinación más o menos agresiva de los maoríes, sino que el suyo es un análisis geográfico de cómo una cultura sobrevive sobre otra. Sin embargo, si por un momento nos volviéramos extremadamente simples e hiciéramos una valoración moral de la agresividad, – digamos por ejemplo que “la agresividad es mala”-, vemos cómo llegamos a conclusiones tremendamente extrañas y espurias. Pongamos que los maoríes son gente desdeñable por su estilo social aguerrido, y que los morioris son moralmente superiores por su inclinación hacia la armonía. Pongamos además que hay unos “genes de la violencia” y unos “genes de la armonía”.  La conclusión es que los primeros nunca sobrevivirían ya que siempre serían exterminados por los segundos.

Creo que es bueno entender que no hay una causa que produzca una consecuencia de forma necesaria y suficiente en la realidad humana. Correlación no implica causalidad. Todos lo entendemos, ¿pero nos comportamos como si realmente lo creyéramos?. Y esto es aplicable a la violencia en el cine, los móviles y al consumo de marihuana.

En 1532 las armas no derrotaron a Atahualpa. Fue la superstición.

La entrada Tecnofobia: Desde cajamarca hasta Black Mirror aparece primero en Psicocode.



from Psicocode http://ift.tt/2k9uLnR
via IFTTT

miércoles, 25 de enero de 2017

Trastornos mentales más frecuentes

Ciñéndonos a los datos aportados por la Organización Mundial de la Salud (OMS), os vamos a detallar cuáles son los trastornos mentales más frecuentes en la actualidad. Notas previas: las.

La entrada Trastornos mentales más frecuentes aparece primero en depsicologia.com.



from depsicologia.com http://ift.tt/2klaQ35
via IFTTT

¿Se puede mejorar la autoestima?

autoestima

La “autoestima” es la autovaloración que hacemos de nosotros en la vida adulta. Consiste en una buena apreciación y reconocimiento de nuestros aspectos más valiosos pero también la aceptación de las propias limitaciones, sin que ellas nos condicionen ni nos hagan sentir mal. En este sentido debemos ser capaces de balancear nuestras debilidades con los aspectos más destacables de nuestra personalidad.

¿De dónde surge la autoestima?

La función parental a la hora de valorar y alentar los aspectos de la personalidad más valiosos de los hijos es fundamental puesto que la autoestima se construye desde el primer desarrollo evolutivo en la infancia. En un primer momento la autoestima se alimenta de la imagen que los padres o las figuras afectivas devuelven al niño de ellos mismos.

Ya en la edad adulta, el tipo de autoestima que queremos, dependerá de nosotros y es posible trabajar para aumentarla.

Este proceso puede considerarse parte el desarrollo personal… pues entonces… a trabajar que merece la pena y se puede lograr!

¿Qué sucede si tenemos una baja autoestima?

Cuando tenemos una baja autoestima tendemos a pensar en términos negativos sobre nosotros mismos y nos cuesta mucho identificar nuestras capacidades o habilidades más valiosas.

Las consecuencias de una baja autoestima pueden ser graves, ya que posiblemente lleven a la persona a ser muy vulnerable y sensible ante las críticas de los demás, y a experimentar un sentimiento frecuente de rechazo. Puede darse que se busque en todo momento la aprobación de los demás para que, precisamente, afiance la autoestima.

También puede conllevar a tener actitudes de permanente complacencia y de aceptación en todo momento de los deseos del otro, solamente para hacerse con su aprobación. Estas personan de baja autoestima, suelen renunciar a sus intereses y necesidades personales, y hasta a su propia identidad, corriendo un alto riesgo de manipulación por parte de otros con el agravante de que pueden atraer a personalidades muy dominantes o controladoras, que se aprovechen de sus inseguridades.

Por ese motivo, la falta de una buena autoestima es un motivo para acudir al Psicólogo Clínico y tratarla con Psicoterapia. En ocasiones frecuentes ella es el origen de otros tantos padecimientos psíquicos como por ejemplo la depresión o ansiedad, trastornos obsesivos o alimentarios, etc… Otras veces es el escenario ideal para que surjan con el tiempo determinados trastornos psicopatológicos.

Beneficios de tener una autoestima sana

Para una persona con una buena autoestima es más importante sentirse bien consigo mismo que obtener la aprobación de los demás… Al tener una sana autoestima puede aceptar las críticas, tolerar el rechazo y la frustración de no gustar a todo el mundo, sin que ello le dañe excesivamente… Todo ello le permite poder seguir siendo una persona “auténtica” y mostrarse “segura” frente a la sociedad, a la hora de defender sus deseos, necesidades derechos, e intereses personales…

Aquellas personas que poseen una buena autoestima se sienten merecedoras del afecto de otras personas, y son al mismo tiempo más libres y felices aún sin contar con la aprobación de los demás.

Por eso te dejamos 20 consejos que pueden ayudarte a mejorar tu propia autoestima

  1. Comienza por aceptarte a ti mismo tal cual eres.
  2. Recuérdate todo lo que vales.
  3. Céntrate en cómo mejorar tu vida.
  4. Intenta descubrir cuáles son tus miedos para poder hacerles frente
  5. Si es necesario atrévete a decir “NO”
  6. No te compares con otros.
  7. Ponte metas realistas y fáciles de cumplir.
  8. Identifica tus puntos fuertes.
  9. Pide ayuda. Todos los seres humanos la necesitamos.
  10. Sé positivo y optimista.
  11. Pon en movimiento tu cuerpo, aunque sea con una simple caminata.
  12. Descansa la cantidad de horas suficientes.
  13. Diviértete junto a otras personas.
  14. Busca relacionarte con otra gente, que tenga un carácter positivo.
  15. Busca un espacio para disfrute personal y haz la actividad que más te guste hacer cocinar, escribir, escuchar música….
  16. Procura tener una dieta equilibrada.
  17. Admira la naturaleza.
  18. Acepta y perdónate si te has equivocado.
  19. Si tienes algún problema grave, pide ayuda a un profesional.
  20. Sé moderado cuando realizas autocrítica.

Mejorar tu autoestima será un proceso lento, puede ser más o menos difícil, pero lo más importante … ¡Es posible!

La entrada ¿Se puede mejorar la autoestima? aparece primero en Psicocode.



from Psicocode http://ift.tt/2jwh7rE
via IFTTT

La delgada línea entre el póker y la psicología

poker y psicología

Aunque a veces englobemos los juegos de cartas como el póker en el gran mundo del azar, los que lo practican saben bien que no es así. No sólo requieren técnica y estrategia, sino un sinfín de habilidades y capacidades adheridas a la propia persona.

El debate entre si el póker es considerado un deporte, como lo es el ajedrez, está abierto desde hace muchos años, sin llegar a ninguna conclusión de consenso entre las partes a favor y contrarias.

En cualquier caso, independientemente de si se considera deporte o no, está claro que, como en éste, entran en juego aspectos de la psicología. El primero, podemos decir que es el de la motivación, si se juega sólo por socializar con el único fin de divertirse, o si se juega por decisión firme orientada a convertirse en un jugador profesional. Es en este segundo perfil donde merece la pena pararse a reflexionar qué aspectos de la personalidad y habilidades entran en juego en cada mano de cartas. 

El equilibrio emocional es básico, por varios motivos. Para empezar, hay que tener en consideración que, aunque parezca que se tiene el control, no es así. Desde el momento en el que un jugador se sienta a la mesa, juega con otras personas, por lo que el valor de sus cartas dependerá del de las cartas de los demás, así como de otros factores aleatorios que interfieren en las partidas y que hacen que, cada jugador, tome una decisión distinta a otra, por lo que no hay que pretender querer abarcarlo todo.

Lo que se escapa del control del jugador, se sustituye por la empatía, será ésta quien le ayude a intuir las cartas del adversario, a través del lenguaje no verbal, las miradas, los movimientos de las manos o un minúsculo e inapreciable arqueo de cejas. Otros juegos además del póker han ido demostrando este hecho.

La empatía, que consiste en ponerse en el lugar del otro, es uno de los aspectos más importantes de la personalidad, nos facilita relacionarnos con los demás en todos los ámbitos de la vida, se desarrolla desde pequeños, a través de la comunicación emocional, la capacidad de escuchar y comprender sin prejuicios y mantener viva la curiosidad y las ganas de descubrir y sorprenderse. Probablemente, aquellos que tengan un mayor nivel de empatía, percibirán más detalles durante las partidas o, al menos, con menor esfuerzo. 

Y, otro aspecto que no se puede olvidar es la frustración. Como en cualquier juego, hay que saber perder y hay que saber ganar. Si en una mano no ha ido bien, el jugador tiene que conseguir mantenerse tranquilo, sin entrar en una espiral de negatividad, sin ser agresivo o querer autoboicotearse jugando de manera distinta a lo que haría normalmente hasta entrar en tilt.

Si bien, “Tilt” viene del póker, observamos cómo, en otras lenguas como el italiano, va adoptada en la vida cotidiana, “andare/essere in tilt” sería como un estoy confusa/o o desquiciado/a, generalmente por algo que ha sucedido.

Empatía, querer tener todo bajo control, o la gestión de la frustración son aspectos de la psicología y de la conducta de las personas que se sientan a la mesa en una partida de cartas, por lo que es muy importante trabajar para conseguir un gran equilibrio emocional. 

Fuente de la Imagen: Marta Pano / Pixabay

La entrada La delgada línea entre el póker y la psicología aparece primero en Psicocode.



from Psicocode http://ift.tt/2khs9lr
via IFTTT

martes, 24 de enero de 2017

Estrategias efectivas para dejar la necesidad de aprobación

aprobación externa

El deseo de aprobación externa puede ser realmente destructiva si se llega a convertir en una necesidad. Generando así inseguridad y frustración al no poder cumplir con la expectativa de los demás. Dejar de necesitar la aceptación del resto nos hará personas más libres y auténticas, capaces de darnos a nosotros mismos la importancia y valorización que realmente merecemos.

Si sientes que necesitas de la aprobación del resto para hacer algo, significa que estás dejando algo tan importante como tu propio valor personal, a merced de lo que puedan pensar los demás.

Es probable que, durante tu vida, hayas desperdiciados bastante energía y tiempo en conseguir inconscientemente la aprobación de tus cercanos.

Si el anhelo de conseguir la aceptación del resto se ha transformado en una “necesidad” en tu vida, debes hacerte el favor de trabajar urgentemente en ti mismo, en pos de un verdadero cambio en tu vida.

¿Que es la búsqueda de aprobación?

Para comenzar, puedes tratar de entender que la búsqueda de aprobación no tiene porqué ser dañina, puesto que es parte de nuestra naturaleza sentirnos bien cuando los demás adulan nuestro trabajo o persona. Este deseo es sano siempre y cuando no se convierta en una necesidad que nos lleve a basar todos nuestros esfuerzos en conductas que solo buscan el reconocimiento externo.

Si solamente apreciamos la aceptación externa, nos sentiremos felices con el apoyo que nos brinda el resto, pero cuando esta se convierta en una necesidad, provocará el desmoronamiento de nuestra persona al no conseguir alguna opinión aprobatoria.

Tener la necesidad de aceptación externa, es dejar algo tan importante como nuestro sentido de valor personal, a merced de lo que pueda opinar el resto según le plazca, por lo que, te arriesgas a llevar una vida de victimización y culpa, responsabilizando siempre al resto de tus propias frustraciones. 

Como dejar de necesitar la aprobación de los demás (estrategias)

Con el fin de dejar nuestra necesidad de aprobación, debemos sintonizarnos con las retribuciones que nos brinda seguir este comportamiento, además de mantener pensamientos constructivos sobre tu persona, a pesar de recibir el rechazo de los demás. algunas de las estrategias para dejar nuestra necesidad de aprobación son:

  • Si sientes que están intentando manipularte rebajando tu autoestima, haz saber tu verdadera valía y mantén una postura firme, aunque abierta al diálogo.
  • Al recibir una crítica, puedes agradecer internamente a la persona, por brindarte observaciones que pueden ser útiles para tu crecimiento personal (a pesar de ser cosas que pueden no gustarte), sin embargo, debes tener presente que cualquier cambio debe efectuarse por nosotros mismos antes que por llenar la expectativa de otra persona.
  • Puedes aceptar el hecho que hagas lo que hagas siempre habrá un gran porcentaje de personas que no estarán de acuerdo tú nuestro comportamiento, por lo que es absurdo valorar tu persona según lo que diga el resto
  • Niégate a discutir con el resto sobre lo acertado que está tu posición mediante justificaciones y excusas que solo buscan cambiar la percepción que tienen otros sobre nosotros mismos.
  • Cada vez que sientas el rechazo de los demás, puedes preguntarte ¿a pesar de su opinión, puedo hacer cosas valiosas por mí y por los demás? ¿puedo ser feliz a pesar de su rechazo?

Así como estas, existen infinidades de estrategias para acabar con nuestra impetuosa necesidad de aceptación, lo importante es comprometernos firmemente con amar y valorar nuestro propio ser, sin importar lo que pueda decir el resto.

Comportamientos típicos de la necesidad de aprobación

A continuación, se dictarán algunos de los comportamientos típicos que se realizan en búsqueda de aprobación externa:

  • Cambiar nuestra postura o forma de ser porque puede ser rechazada por el resto
  • Halagar a una persona para que esta nos quiera
  • Sentirnos deprimidos o perturbados cuando alguien está en desacuerdo con nosotros
  • sentirnos insultados cuando alguien expone una opinión contraria a la tuya
  • Ser incapaces de decir no cuando nos piden un favor
  • decir cosas que realmente no crees, por temor a que la gente te rechace
  • Difundir alguna noticia sobre muertes, separaciones, robos o alguna catástrofe, por recibir la atención de los demás

Por qué esta necesidad es tan dañina

El no tener la aprobación del resto, provocará que caigamos en conductas destructivas, puesto que muchas veces inducen a que cedamos haciendo o diciendo cosas que realmente no queremos, con el fin de sentir que pertenecemos a cierto grupo.

Es prácticamente imposible agradar a todo el mundo, no importa que tan bien te comportes o hagas tu trabajo, siempre habrá personas a las que no les guste lo que haces. puede que alguien se encuentre irritable o tenga algún drama personal que lo haga desaprobar tu actuar. Y esto es totalmente normal, somos personas distintas con distintos sistemas de creencias, que alguien nos rechace no quiere decir que hayamos hecho algo malo, si no que solamente no le parece apropiado nuestro comportamiento.

Consecuencias de la necesidad de aprobación externa

Hacer que nuestra valía y nuestros proyectos sean dependientes de lo que diga el resto, hará que enfoquemos nuestros esfuerzos inútilmente en una causa imposible y frustrante. Además de ser susceptible a posibles manipulaciones y abusos tanto en nuestro trabajo como en nuestra vida cotidiana.

Cuando nuestra necesidad de aceptación se transforma en necesidad, las probabilidades de formar relaciones verdaderas desaparecen. Transmitir a las personas una postura que siempre busca aprobación, proyectara una imagen de alguien poco confiable.

Es algo embarazoso enfrentarnos con el rechazo de los demás, a nadie le gusta que lo critiquen o lo miren feo por no compartir la misma opinión, por lo que frecuentemente optamos por un comportamiento más fácil capaz de adaptarse siempre a la opinión de los demás, pero al elegir este comportamiento, le estas dando mayor importancia a la opinión que los demás tienen sobre ti, que a tu misma valoración personal. cediendo toda tu capacidad de llevar una vida libre e independiente, mientras mayor sea tu necesidad, más fácil podrás ser manipulado. 

Origen de la necesidad de ser aceptado

Esta necesidad tiene su fundamento en la premisa de: “confirmar todo con los demás, antes de confiar en tu opinión. El ambiente cultural en el que crecimos la mayoría de nosotros, fomenta en gran medida fiarnos más en la opinión del resto, antes que la de nosotros

Necesidad de aceptación en la familia

Cabe destacar que los niños, verdaderamente necesitan de la aprobación y aceptación de los padres en sus primeros años, pero este no tiene porqué ser siempre, durante el periodo de infancia tampoco se debe respetar totalmente la autoridad de los padres, un niño puede hacer cosas por sí mismo, sin necesidad de que le digan si esta bien o no. para animar a nuestros hijos a la independencia adulta, es necesario apoyar a nuestros niños desde temprana a edad, a hacer cosas por sí mismos.

El núcleo familiar promueve inconscientemente bajo una apariencia de” buena intención” la dependencia de cada uno de sus miembros, bajo una necesidad de aprobación colectiva.

Necesidad de aceptación en instituciones

Algunas de las instituciones de donde aprendimos esta necesidad son la iglesia y la escuela, puesto que continuamente nos llenaba la cabeza con mensajes de complacer a “Dios” o a nuestros profesores, se nos premiaba y aceptaba por seguir las normas institucionales, se nos enseñó a quedarnos callados cuando nos pedían silencio, a no pararnos de nuestros asientos en clases y sobre todo a buscar las respuestas en textos o “expertos” ante que descubrirla o formular tus propias teorías.

Por una vida auténtica

Estos fueron algunas de las evidencias y estrategias necesarias para poder trabajar con nuestra necesidad de aprobación, debemos recordar que la aprobación externa solamente es dañina cuando esta se convierte en una necesidad que nos inmoviliza, por miedo a lo que diga el resto.

La voluntad que tengas de exponer siempre tu parte auténtica antes que un falso yo que le agrade a los demás, será determinante para salir del ciclo de necesidad de aprobación, no debes temer y desesperarte, ahora que tienes conciencia de tu necesidad es solo cosa de poner en práctica lo aprendido.

Seamos capaces de comprometernos con nuestro propio valor personal y a enfrentarnos a la desaprobación y al rechazo de manera comprensiva y constructiva.

Debemos ser valientes y demostrarle a nuestro yo auténtico que no hay nada que temer, si nuestros amigos, familiares o pareja no le agrada lo que ven, pues significa que siempre fue una relación falsa y nos harán un favor al alejarse. Exponer tu parte auténtica te facilitara formar nuevas y mejores relaciones, más sinceras y duraderas.

¡Demostrémosle al mundo que, sin importar cualquier rechazo, que nuestro yo auténtico si merece estar presente en esta vida!, puesto que nos ganamos ese derecho simplemente por ser parte de este mundo.

No seas lo que los demás quieran que seas, sé lo que tú quieres ser.

Photo Credit: Mujer con dos caras via Shutterstock

La entrada Estrategias efectivas para dejar la necesidad de aprobación aparece primero en Psicocode.



from Psicocode http://ift.tt/2jXMNtx
via IFTTT

lunes, 23 de enero de 2017

Desde que se legalizó la marihuana en Holanda el consumo de drogas duras ha disminuido

legalización marihuana

En Holanda el consumo de la marihuana es legal. Desde hace tiempo puede comprarse, venderse y consumirse con total normalidad en los popularizados coffeeshops. Hay que tener en cuenta que este es un país que se distingue por su carácter liberal, que tiene en muy alta valoración la libertad individual de las personas.

Según los expertos económicos esta situación ha provocado el denominado turismo de drogas, ya bien posicionado entre los extranjeros. Son muchos los que viajan al país donde es fácil encontrar un grow shop barato,  no solo para conocer sus ambientes y cultura, también para disfrutar del consumo de cannabis en lugares públicos y su venta en establecimientos sin presión social ni legal de ningún tipo. 

En un principio, la venta, compra y consumo de esta sustancia estaba totalmente legalizada en Holanda, sin embargo existía un vacío legal, los dueños de los comercios no podían adquirir el cannabis legalmente ya que, hasta hace dos años, el cultivo se marihuana seguía siendo una actividad prohibida.

La reciente flexibilización de la normativa por parte de la administración no estuvo exenta de polémica, por un lado los sectores más conservadores del país entendían este claro paso hacia la normalización plena como una batalla perdida contra las drogas, y por otro otros países europeos se apresuraron a defender sus leyes ante los miles de ciudadanos que miraban con con cierta ambición de imitación a los holandeses.

A pesar de que son muchos los gobiernos que aseguran que una apertura al consumo legal de la marihuana supondría un desastre social en cuanto a la concepción de las drogas y la extensión de las adicciones, algunos de los países que han abierto esta puerta parecen ofrecer datos que rebaten estas predicciones catastróficas.

Según los contrarios a este tipo de políticas, el acceso fácil a esta droga no hace sino facilitar su consumo, sin embargo , ya son varios los estudios que contradicen sus argumentos, puesto que los factores y pautas repetitivas del consumo, como la edad de inicio o la cantidad de droga en Amsterdam, sigue siendo hasta hoy muy similar a los de los países que mantienen la prohibición a sus ciudadanos.

Estos hallazgos ponen en duda las atribuciones de los partidarios de la criminalización, que aseguran que sin la amenaza de un castigo la frecuencia y cantidad de cannabis consumido aumentará y supondrá un problema para la salud pública.

Por el contrario, la política holandesa sobre drogas, sostiene que al despenalizarlo, las drogas duras como la heroína, que refuerza problemas de narcotráfico, adicción y muerte, entre otros, disminuyen considerablemente su grado de popularidad.

Además, la legalización del consumo de marihuana ha tenido efectos positivos en el país, eliminando casos de delito por narcotráfico y fomentando la normalización de investigaciones médicas con marihuana.

Numerosos expertos apoyan que lo que realmente condiciona el consumo de drogas tan ampliamente utilizadas no son las medidas legislativas poco flexibles, sino que lo serán los controles sociales, es decir, normas o indicaciones sobre dónde, cuándo y con quién consumir cannabis.

Fuente: l.s./Pixabay.com

La entrada Desde que se legalizó la marihuana en Holanda el consumo de drogas duras ha disminuido aparece primero en Psicocode.



from Psicocode http://ift.tt/2j5Eesc
via IFTTT

miércoles, 18 de enero de 2017

Hacer una portabilidad sin morir en el intento

Hoy quiero escribiros sobre algo por lo que habéis pasado la mayoría de vosotros: hacer una portabilidad sin morir en el intento

Cuando alguien viene al psicólogo y decide no volver o se marcha porque no le cuadra la intervención NO LE HAGO SENTIR MAL NI LO AVASALLO A LLAMADAS HACIENDOLE OFERTAS PARA QUE CONTINUE SI O SI RECIBIENDO MIS SERVICIOS.

Me considero una persona asertiva, que además enseño estrategias asertivas en muchas de las intervenciones que hago y aun así, hacer una portabilidad sin morir en el intento es una tarea complicada.

Asertividad: ¿Qué es?, ¿Cómo se trabaja?

Quiero escribiros sobre la situación de hace unas semanas en las que decidí hacer una portabilidad. Este post pretende daros algunos ejemplos de respuestas asertivas que mediante la claridad y el humor, pueden ayudarte a no caer en trampas manipulativas para hacer una portabilidad sin morir en el intento.

¿Cómo hacerse respetar? 10 claves para conseguirlo

¿Qué va a pasar cuando decides hacer una portabilidad?

La compañía a la que te vas a dar de alta te regala el oro y el moro. Hay veces, que uno quiere cambiar porque realmente le da la gana de hacerlo, ni más ni menos. Pues bien, la compañía a la que te das de baja te regala también, el oro y el moro haciéndote la mejor oferta por la que te has estado arrastrando durante los 6 años que has sido su cliente.

Entiendo que te llamen para convencerte de que sigas, que te digan que van a tener en cuenta la fidelización y que me vendan la moto con lo que ellos puedan y quieran comprometerse. Y hasta es posible, que en este intento consigan que cambie de opinión y continúe con ellos.

5 trucos psicológicos para influir en las personas

¿Qué pasará si continuas adelante con tu portabilidad ?

Entiendo que hay que venderse y que cada uno ha de hacer su trabajo de la mejor forma, pero sin pasar determinadas líneas. Perder un cliente toca las narices pero no es mi intención, tocar las narices de nadie cuando decido hacer un cambio en mi vida, del tipo que sea.

Si llegado a este punto, sigo estando interesada en mi portabilidad por favor dejen de repetir la oferta ya les he dicho que no, que entiendo que ese es su trabajo y que muchas gracias por todo. Entonces, empieza la función con una serie de preguntas que rozan la mala educación, la agresividad y el no respeto de la intimidad de la persona.

El arte de negociar: para emprededores como tú

Voy a intentar trascribir algunos de los momentos de la conversación mantenida con un teleoperador que me mandó a otro teleoperador, el cual me derivó a otro compañero…blablabla. Espero que os pueda servir de ejemplo para hacer una portabilidad sin morir en el intento:

Compañía: ¿Cuáles son los motivos por los que usted ha decidido cambiar de compañía?
– (No estás obligado a contestar a ninguna pregunta) “Pues mire, los motivos es algo mío no creo que aporten nada en este punto en el que quiero continuar con mi portabilidad. Sus compañeros ya me han informado de la mejor oferta, ya se cuales son las ventajas que me ofrecen pero por no hacerles perder el tiempo ni que ustedes me lo hagan perder a mi, le agradecería que continuara con mi portabilidad”

Compañía: Ha contrado con X compañía los siguientes servicios (a mí siempre me suenan a chino) con una factura equivalente a X€ ¿es cierto?
– Pues mire, entiendo que esté usted súper interesado en saber mis condiciones de contrato con otra compañia pero creo que es algo que pertenece a mi intimidad. De todos modos, si ya lo sabe ¿para qué pregunta?

Compañía: ¿Pero sabe que con esta nueva compañía le va a salir más caro el servicio?
– Si, lo sé y aun así he decidido continuar con mi portabilidad

Compañía: ¿Pero la diferencia al año es de X€?
– Menos mal que me avisas, la verdad es que me costó dejar de pensar en pesetas pero ya he logrado hacer bien la conversión a €,  le agradezco su preocupación.

Compañía: ¿Pero sigue estando interesada en pagar más?, ¿usted no valora el dinero? Otras personas si…
– “Hay veces que las personas hacemos los cambios, unas veces para pagar más y otras veces para pagar menos, pero donde yo decido gastar mi dinero no es incumbencia de nadie”

Compañía: Entonces, ¿usted se va por orgullo?
“No es la compañía que abandono uno de mis bienes más queridos ni tampoco a la que me voy se va a convertir en algo por lo que sentir o no orgullo…”

El tono del teloperador fue agresivo y moralista, queriendo hacerme sentir la persona más derrochadora y tonta de este planeta por tomar la simple decisión de pagar más por un servicio que aun siendo igual no lo es, tiene otra “tontás” innecesarias que quiero probar…¿qué hay de malo en ello?

Aprender a decir que no

Lo peor de todo es que si el día de mañana decido volver a cambiar, la compañia de la que soy cliente en la actualidad volverá a utilizar las mismas estrategias para intentar convencerme de seguir con ellos…

¿Qué es lo que más te ha tocado las narices cuando has decidido continuar con una portabilidad?

 

La entrada Hacer una portabilidad sin morir en el intento aparece primero en WebPsicólogos.



from WebPsicólogos http://ift.tt/2jMNFOZ
via IFTTT

¿Las fotografías afectan la forma en que recordamos nuestra vida?

recordamos nuestra vida

Había una vez un mundo en el que tomar una fotografía era caro y complicado. Una cámara fotográfica era un dispositivo tecnológico delicado y difícil de usar. Revelar las fotografías era un proceso lento y que había que dominar con maestría y que se aprendía lentamente como el trabajo de cualquier artesano experto.

En esa época, tener una o dos fotografías que representaran toda la niñez era ya un lujo. Esas fotografías estáticas, quizá en un lugar turístico o frente a la iglesia el día de la fiesta del pueblo eran un recuerdo puntual y concreto que no afectaba el resto de la construcción de la memoria de nuestra vida. Eran pocas, valiosas, un pequeño tesoro (en un principio en blanco y negro, más adelante en color que desaparecía paulatinamente con el paso del tiempo), que sólo capturaba un momento y no eran desencadenantes de una historia continua.

Poco a poco, la fotografía se fue haciendo más accesible. Los dispositivos de captura se hicieron más fáciles de manipular, y a pesar de que los fotógrafos profesionales sigan siendo los poseedores de una técnica que el resto de las personas no tienen, cada vez más y más personas han adquirido la posibilidad de capturar imágenes en la vida cotidiana.

Cuando las fotografías dejaron de precisar ser reveladas para ser observadas, es decir, con la llegada de la fotografía digital, esta posibilidad se multiplicó hasta el infinito. El límite se va haciendo cada vez menos definido y podemos capturar de forma casi indefinida sonrisas, acciones, lugares, momentos.

Ello tiene sin duda un impacto en la forma en que construimos nuestros recuerdos a largo plazo. En lugar de sólo contar con lo que naturalmente hemos almacenando en nuestra memoria, vamos tomando como auxiliares los cientos (o miles) de fotografías tomadas, compartidas en redes sociales, vistas una y mil veces. Es en ese momento que la frontera entre lo que realmente pasó y lo que narramos con nuestras fotografías, las tomadas, las seleccionadas, las compartidas en redes sociales, filtradas, recortadas, modificadas… se hace cada vez más difusa.

¿Recordamos cómo fue nuestra boda porque hay imágenes, eventos, voces y sonidos grabados en nuestra mente, o recordamos una re-narración de nuestra boda, construida en base a una serie de fotografías vistas una y otra vez?

En una era de saturación de imagen, es innegable que esta imagen afecta al proceso de construcción de recuerdos a largo plazo de nuestra propia vida. Que confiemos a las fotografías parte del trabajo que antes dábamos a nuestra propia memoria. Es tan fácil sólo ver las fotos de nuestro viaje a Madrid en lugar de cerrar los ojos y recrear olores, sensaciones, sonidos y voces. De volver a caminar museos con nuestra mente y sin la ayuda de las trescientas fotografías realizadas.

No es que sea un proceso malo per se, es simplemente que es diferente. Nuestros hijos, a fuerza de ver y volver a ver las fotografías de su primer cumpleaños, podrán recordar esa fiesta, en tanto que personas que hoy en día tienen en torno a cuarenta años, no recuerdan nada de una etapa tan temprana de su vida.

Restará a la Psicología y otras ciencias del comportamiento el analizar la incidencia a largo plazo de este proceso en la forma en que los seres humanos construimos nuestros recuerdos. ¿Podríamos volver a hacerlo sin un caudal casi interminable de fotografías e imágenes?

Photo Credit: Fotografías via Shutterstock

La entrada ¿Las fotografías afectan la forma en que recordamos nuestra vida? aparece primero en Psicocode.



from Psicocode http://ift.tt/2jJROTR
via IFTTT

martes, 17 de enero de 2017

Depresión ¿Crees que tienes pensamientos depresivos?

El número de personas que padecen depresión está en alza desde hace unos años y es importante conocer qué es lo que hacemos cada uno para perpetuar esa situación. ¿Crees que.

La entrada Depresión ¿Crees que tienes pensamientos depresivos? aparece primero en depsicologia.com.



from depsicologia.com http://ift.tt/2juBmZK
via IFTTT

Por qué hablar sobre tus Fantasías Sexuales con tu Pareja

fantasías sexuales

El sexo también forma parte de la comunicación en la pareja. Al igual que las palabras, las miradas o las sonrisas, forma parte de su lenguaje más íntimo, de la expresión del amor y la complicidad. Y, como en todos los ámbitos de la relación, conviene no dejar de probar cosas nuevas, sin miedo a utilizar juguetes sexuales como los que se pueden encontrar en Mundoerotico.es o intentando nuevas posturas que maximicen el placer de ambos para huir de la tediosa rutina que, a veces, persigue hasta alcanzar a numerosas parejas.

Si queremos, podemos concebir la vida como un gran queso o tarta en la que cada una de sus porciones está ocupada por un aspecto: trabajo y carrera profesional, vida sentimental, relaciones sociales, relaciones familiares y vida personal. Normalmente, dependiendo de en qué fase nos encontremos, la porción de la tarta será más o menos grande. Por ejemplo, las relaciones familiares tomarán un peso relevante con el nacimiento de un bebé o el trabajo cuando se está buscando un ascenso.

Las porciones de esta enorme tarta en la que se clasifican nuestras necesidades y ámbitos de nuestra vida, se dividen, a su vez, en pequeñas raciones también. Encontrar el equilibrio y poder cubrir cada una de ellas nos proporciona una gran serenidad y nos garantiza una relación sana en y con todos los frentes de los que formamos parte.

Así, el pedazo de la tarta que ocupa la vida sentimental está formado por muchos trocitos que están interrelacionados con los demás, en una especie de “Yo soy yo y mis circunstancias” que decía Ortega y Gasset, porque no podemos entender nada como aislado en una relación de pareja, máxime cuando se trata de relaciones humanas.

La sexualidad juega un papel protagonista. Es transversal, implica deseo, implica complicidad, amor, pasión y, también, sexo. Y de la mano de la sexualidad, la comunicación. Hay muchos tabús aún en nuestra sociedad sobre el sexo, ya que forma parte de la vida íntima de las personas y todavía es un tema de conversación con el que nos sentimos incómodos. Pero, ¿también en la pareja existe ese tabú? ¿Por qué no hablarlo? Al fin y al cabo, es algo que está ahí, que se practica y que no deja de marcar un aspecto importante en las relaciones sentimentales. Quizá, si preguntamos, nos demos cuenta de que no se menciona demasiado.

Vamos más allá, ¿por qué no hablar también de las fantasías sexuales que cada uno tiene? No hacerlo es casi como no querer compartir algo en el que puede participar el otro y, además, a veces, hasta poder cumplirlo, siempre dentro de un orden, claramente.

Tener sexo en un lugar público, en el baño de un avión, hacer un trío, hacerlo sobre la mesa de la oficina tirando todos los papeles  y carpetas…son algunas de las fantasías más comunes que existen y, a partir de ahí, todas las variedades posibles e inimaginables. Compartir estos sueños sexuales que antes estaban sólo en nuestra imaginación, hacen aumentar el deseo de ambos, nos enriquecen y nos ayudan a mantener vivo el erotismo en la pareja, dando a la espalda a cualquier rutina que quiera inmiscuirse en la relación.

La entrada Por qué hablar sobre tus Fantasías Sexuales con tu Pareja aparece primero en Psicocode.



from Psicocode http://ift.tt/2jTwHxC
via IFTTT

viernes, 13 de enero de 2017

Estar en el anzuelo de alguien o cuando uno siente amistad y el otro esta enamorado

El otro día, vi un capítulo de como conocí a vuestra madre que iba sobre “tener a alguien en el anzuelo”.

No sé si esa traducción del inglés es correcta (a mí me suena rara) pero el concepto es interesante y casi todos hemos sido alguna vez el pez (en el anzuelo) y otras veces el pescador (que teníamos a otra persona en el anzuelo).

¿Qué es estar en el anzuelo?

Pues es esa relación de “amistad” que estableces con alguien que te gusta, pero que no está dispuesta a tener una relación sentimental contigo (porque ya tiene pareja, porque no quiere, por…).

Y que se deja querer por ti.

Al fin y al cabo a todos nos gusta tener a alguien que nos baile el agua y nos haga sentir bien.

Cuando estás en el anzuelo de alguien

Cuando estás en el anzuelo de alguien, sueles conformarte con amistad, aunque lo que deseas es una relación sentimental.

Y acabas magnificando lo que te favorece (“está mal con su novio”, “se ha abrazado a mi buscando consuelo) y despreciando la información que no (“si sigue con su novio, es porque es con él con quien quiere estar”, “busca mi abrazo y mi consuelo porque estoy disponible”.

Te adaptas a lo que ella quiere, eres el amigo fiel y siempre disponible y no exiges nada a cambio. Estar con ella ya es bastante premio.

Y albergas la secreta esperanza, que en algún momento, se dé cuenta de que estás ahí, de que la quieres y de ella también te quiere y eres el hombre de su vida.

Sabes que eres un plan B, o un plan C y aun sufriendo, lo aceptas.

Ves con asombro y dolor, que el día que decide ponerle los cuernos a su novio, ni siquiera es contigo, porque “no quiere poner en riesgo vuestra amistad”

Cuando tienes a alguien en el anzuelo

Cuando tienes a alguien en el anzuelo, a no ser que te confronten, quieres creer que no es así.

Al fin y al cabo, cuando estoy con ella me lo paso bien, es una buena amiga y me hace sentir bien.

Compartimos aficiones y momentos y yo no estoy engañando a nadie. Sabe que tengo novia.

Y los dos sabemos que aquella noche que nos dimos cuatro besos fue una tontería que no significaba nada.

Cuando tienes a alguien en el anzuelo disfrutas de tener a alguien que baila el agua.

Que disfruta de ver 4 horas de cine de Kurosawa en versión original y en blanco y negro porque “a ella también le gusta”.

Y que se queda a dormir en tu casa porque se ha hecho tarde, no porque espere que pase algo entre nosotros.

¿Esto es una historia de víctimas y culpables?

Seguramente es posible que te sientas identificado con las dos historias que he contado y es muy posible que las hayas vivido historias similares en tu propia piel.

Y, aunque a simple vista puede parecer que hay víctimas y culpables, en realidad, habitualmente no es así.

Ni el pescador es un cabrón ni el pescado una pobre víctima.

Las relaciones interpersonales son complejas y en muchas ocasiones tiene poco que ver lo obvio (lo que se dice y se hace) y mucho con lo que subyace (lo que se siente y se piensa).

La cuestión es, que en este tipo de relaciones, como mínimo sufre una persona, y con un poco de mala suerte acaban sufriendo las dos.

Cómo dejar de ser pescado o pescador.

Lo que es importante (o por lo menos saludable a nivel psicológico) es saber cortar este tipo de relaciones cuando te das cuentas de que las has establecido, porque no deja de ser una relación tóxica.

Para saber cómo dejar de estar en el anzuelo, te recomendamos este artículo sobre cómo olvidar a un hombre de la web amoramargo.com.

No estoy 100% de acuerdo en todo lo que se plantea en este artículo (que me encontré revisando documentación para escribir este post), pero si es cierto que plantea algunas buenas ideas.

Y se te das cuenta de que tienes a alguien en tu anzuelo, lo mejor que puedes hacer es ser honrado contigo mismo y con esa persona, dejar la ambigüedad un lado y decirle claramente que no vas a tener una relación más allá de la amistad con esa persona.

¿Y tú, has estado en una situación similar?

La entrada Estar en el anzuelo de alguien o cuando uno siente amistad y el otro esta enamorado aparece primero en WebPsicólogos.



from WebPsicólogos http://ift.tt/2iPRa69
via IFTTT

Cómo vivir el presente cambiando tu diálogo interno

vivir-el-presente

“No nos afecta lo que nos sucede sino lo que pensamos sobre lo que nos sucede”, a veces los mismos acontecimientos pueden afectar de manera muy diferente a las personas.

Cada vez que comenzamos con el diálogo interno ante un suceso, ya estamos generando una emoción.

En el diálogo interno está todo el juego de la fortaleza emocional. No quiero enfocar esto desde la psicología positiva, eso sería repetirnos a nosotros mismos que todo va bien.

Repetir una y otra vez que todo va bien no sirve de mucho, mejor es convencernos de que lo que pasa no es tan malo/terrible/horrible. Nuestra red neuronal forma un sistema maravilloso que nos permite investigar el mundo y vivirlo, pero conviene conocer sus limitaciones. Disponemos de esta herramienta precisamente para experimentar la realidad, no tanto para filtrarla a través del pensamiento.

Cuando nos encontramos mal, nos solemos decir a nosotros mismos “estoy mal, debería hacer esto y aquello para sentirme mejor…¿Qué podría hacer para estar mejor?” y entonces es cuando nos vamos liando nosotros mismos. La primera clave es calmarse.

Las rumiaciones se pueden producir por muchos desencadenantes: una discusión con algún familiar , una equivocación en el trabajo, un examen que no sabemos cómo nos ha salido, un pequeño contratiempo… en definitiva es un suceso que quizá no hemos sabido procesar y por ello se mantiene en nuestros pensamientos.

Pensar menos y vivir más

El pensamiento excesivo es un proceso que genera un considerable desgaste mental. Si cambiamos nuestra manera de pensar se nos abre un mundo de posibilidades, hay que hacer las cosas sin presión. Si nos quitamos presión a nosotros mismos y a los demás conseguiremos tener una vida tranquila , fijándonos en lo que tenemos y en lo que podemos hacer y no en lo que no tenemos y en lo que no podemos hacer. Es entonces cuando podemos disfrutar.

Cambiar nuestro diálogo interno es cuestión de perseverancia. Por lo tanto la clave está en:

  • Detecta qué es lo que te pone mal. Muchas veces es difícil identificar esa sensación desagradable, no te castigues buscando el origen de ese malestar. Más bien, percibe que tu estado cambia.
  • ¿Por qué nos ponemos mal? ¿Qué diálogo interno estamos teniendo? ¿ Realmente este pensamiento me está siendo beneficioso?
  • Hay que cambiar ese diálogo, transformar las exigencias en preferencias. Rebaja las expectativas cuando las cosas no dependan de ti. No sirve de nada sufrir porque las cosas no son como te gustarían que fueran. Son como son.
  • Escribe en una agenda. Cuando observes que tu pensamiento es circular, inútil y agotador déjalo escrito para tratarlo en otro momento.
  • Muévete. La actividad física tiene un efecto bioquímico, se produce segregación de norepinefrina y serotonina. Esta segregación repercute positivamente en el estado de ánimo y modo de pensar.

Cuando nos perdemos fantaseando en lo que podría pasar, en lo que pasará o en lo que pasó nos sentimos presos, ya que no tenemos capacidad de acción. En cambio sí que podemos actuar sobre el presente, sobre este preciso instante.

Photo Credit: Chica practicando Yoga via Shutterstock

La entrada Cómo vivir el presente cambiando tu diálogo interno aparece primero en Psicocode.



from Psicocode http://ift.tt/2jesmZ6
via IFTTT

miércoles, 11 de enero de 2017

La aventura de la soledad

aventura_soledad

Soledad. Carencia voluntaria o involuntaria de compañía.

El otro día, un amigo me contaba que era la primera vez que pasaba la noche y la mañana de Reyes solo, algo que me sorprendió ya que su familia tan sólo vivía a una hora en coche. Con la conversación pude comprobar lo extraño que aún resulta una situación cada vez más extendida: el placer de la soledad.

No la soledad dramática o lastimera a la que podemos estar acostumbrados, sino la verdadera satisfacción de compartir la vida con uno mismo. Eligió de forma voluntaria no compartir con nadie ese día. Envolver sus propios regalos, colocarlos y abrirlos al día siguiente mientras comía tortitas. Un día que parece diseñado para ser vivido en compañía y que supo disfrutar consigo mismo, algo que cualquier otra persona habría vivido de una forma muy triste.

Una sociedad aferrada a la compañía

Vivimos en una sociedad en la que la compañía parece el único camino a la felicidad. Allá donde vayamos, todo cuanto nos rodea, nos recuerda que debemos encontrar una pareja, formar una familia, vivir empalmando un evento social con otro y nunca, nunca quedarnos solos, pese a lo que dicen las estadísticas, y es que el 25% de los hogares españoles están compuestos por una persona que vive sola.

Una soledad en una cultura extremadamente social. Nuestras rutinas más banales siguen estando hechas para ser compartidas y de no hacerlo corres el riesgo de ser tachado de bicho raro. Supermercados llenos de packs indivisibles, de comida siempre en grandes cantidades o restaurantes que sirven ciertos platos sólo a partir de dos raciones, como en aquella escena de Lucía y el sexo en la que el camarero le dice que no hacen paellas para una sola persona.

Con razones como estas, es imposible ir al cine o hacer un viaje solo. Nos vemos forzados a tener un ocio absolutamente social, acostumbrándonos a ello, convirtiéndolo en parte de nosotros, de tal forma que, si nos vemos sin planes una tarde, nos quedamos en casa. ¿Dónde voy a ir yo solo?

¿Existe el miedo a la soledad?

Es ahí, en la absoluta costumbre, donde radica nuestro miedo a la soledad. Un miedo a estar con nosotros mismos, a escuchar nuestra voz interior, o el mero silencio, encontrándolo devastador. Para verlo, sólo tenemos que observar a las personas que están en una sala de espera o que viajan en autobús: están inmersos en sus teléfonos, hablando por Whatsapp, viendo Instagram o leyendo emails. Ocupan cada minuto con las redes sociales porque son incapaces de enfrentarse al silencio.

Como hemos dicho, este miedo tiene su origen en la educación que hemos recibido desde niños. Una cultura que refuerza de forma continua esa creencia, haciendo hincapié en la necesidad de tener siempre a alguien a nuestro lado.

Nos hemos convertido en seres dependientes. Sentimos vacío y miedo cuando no tenemos pareja, nos sumimos en depresiones y nos entra el terrible hambre de la compañía.

Podemos aprender a vivir felices en soledad

Debemos ser conscientes de una cosa y es que, durante toda nuestra vida, siempre habrá un elemento invariable, algo que nunca, pase lo que pase, desaparecerá y ese elemento no es otra cosa que nosotros mismos. Eres tu pasado, presente y futuro. Eres tú el que siempre va a estar. Por eso, disfrutar de tu compañía debe ser parte fundamental de tu vida.

Aprender que cada hecho cotidiano está diseñado para ser disfrutado. Un desayuno en la cama, un concierto, la película que ningún amigo quiere ver, el viaje a Oporto o despertar la mañana de Reyes pueden ser momentos llenos de felicidad, y no es necesario que haya nadie más a nuestro lado para verlo. Tú formas tus experiencias, tus vivencias, tú formas tu felicidad y las demás personas sólo pueden complementarla.

Tienes todo cuanto necesitas para embarcarte en la aventura de la soledad. No necesitas brújula ni mochila, simplemente aprende a escucharte y mirarte, a sonreírte y respetarte y podrás llegar al puerto que tú quieras.

Photo Credit: Chica sóla via Shutterstock

La entrada La aventura de la soledad aparece primero en Psicocode.



from Psicocode http://ift.tt/2j0oiZM
via IFTTT

martes, 10 de enero de 2017

El uso de Facebook reduce el bienestar emocional

El uso de las redes sociales, tal y como se hacen hoy día, está afectando a nivel emocional a sus usuarios sin que estos sean conscientes. Así lo muestra el.

La entrada El uso de Facebook reduce el bienestar emocional aparece primero en depsicologia.com.



from depsicologia.com http://ift.tt/2i8XyZS
via IFTTT

lunes, 9 de enero de 2017

Trucos psicológicos para comer menos durante las fiestas

comer menos

En estas fechas es casi imposible no plantearse la cuestión de las comidas navideñas, cenas de empresas, reuniones con amigos y familiares (casi siempre acompañadas de comidas o aperitivos)… Por ello, vamos a ver cómo nuestra cabeza puede ayudarnos a no cometer los excesos de los que luego podemos sentirnos culpables o arrepentirnos.

Los psicólogos pueden ayudarte en muchas áreas, empezando por ayudarte a darte cuenta que tienes un problema alimenticio (si es que lo tienes), mejorar la adherencia a una dieta, con trastornos de la alimentación… pero en este caso vamos a tratar de dar simplemente algunos consejos para que nuestra cabeza le gane la batalla al estómago.

  • En primer lugar tengo que saber ¿Por qué quiero controlar mi comida? y también ¿Realmente lo necesito? Responder a estas preguntas nos ayudará a estar motivados y concienciados de lo que queremos cambiar y sobre todo del por qué de ello.

  • En segundo lugar ¿Qué quiero conseguir? Necesito tener los objetivos claros, tienen que ser realistas pero desafiantes, es muy importante que tenga un plan de acción para llevarlo a cabo y me organice diferentes tipos de objetivos a corto, medio y a largo plazo.
  • Puedo consultar a un nutricionista o a algún profesional para que me aconseje que alimentos ingerir y cuales evitar si no se cómo hacer.

Hasta aquí hemos hablado a grandes rasgos y en aspectos generales de por dónde podemos empezar a tomar las riendas de este asunto, pero lo que muchos buscamos son respuestas breves y sencillas a las preguntas que tenemos, por eso os dejamos estos “tips” a la hora de sentarnos en la mesa para mejorar nuestros hábitos alimentarios:

  • La expresión “se come por los ojos” es muy cierta, ya que nuestro cerebro está preparado para detectar qué alimentos nos son provechosos y cuáles no, y la forma más fácil que tiene es mediante los sentidos de la vista y el olfato. Tenemos que ser conscientes de esto para no dejarnos llevar por esas ganas irrefrenables de comer cuando vemos u olemos algo con muy buena pinta.
  • ¿Realmente tengo hambre? Uno de los problemas es que muchas veces comemos “por hacer algo”, es decir, ya que han puesto ese plato de papas en la mesa pues cojo, pero muchas veces comemos y no tenemos ni siquiera ganas de comer.
  • Derivado del punto anterior, viene el problema del picoteo. Cuando pico algo, ¿Sé realmente la cantidad que he comido?, en el 90% de los casos no. Además normalmente los aperitivos no suelen ser productos muy sanos, solemos picar fritos o cosas similares con altos contenidos calóricos. Por todo ello es muy importante controlar qué y cuánto “picoteo”.
  • Cuando nos servimos en nuestro plato la comida, tenemos que recordar lo que hemos dicho de que comemos con los ojos. Si yo me pongo el plato hasta arriba mi cabeza muchas veces no se da cuenta y nos comemos todo el contenido sin pensarlo, en cambio si yo me sirvo medio plato y al finalizar me quedo con hambre, tengo la posibilidad de repetir si lo necesitase.
  • Otro pequeño truco que podemos usar para engañar a nuestro cerebro es utilizar platos más pequeños, con lo que las porciones que sirvamos parecerán más grandes al compararlas con el plato y nuestro cerebro sentirá que es más fácil saciarse.
  • Por último, si yo me dedico a comer como una máquina sin procesar lo que estoy ingiriendo, mi cabeza no se da cuenta y no tendré tanta sensación de saciedad. Por ello, es bueno ser consciente de lo que voy comiendo, si me he servido cierta cantidad de esto o de aquello, si cojo cucharadas a rebosar o más pequeñas, si engullo o mastico bien las cosas…

  • Este es otro consejo, si mastico bien, obtengo al menos 3 beneficios, por un lado facilitaré luego la digestión y absorción de nutrientes, y por otro lado me hago más consciente de lo que estoy comiendo, tanto de la cantidad como de los sabores, textura y demás cualidades. Finalmente, al masticar más rato, tardo más en volver a ponerme comida en la boca y eso conlleva a que como menos ya que le estoy dando tiempo a mi sistema a que de la señal de que ya se ha saciado y ha comido suficiente.

Con todos estos consejos, sólo nos queda empezar a ponerlos en práctica y aprender a disfrutar de la comida sin cometer excesos de los que luego nos arrepentiremos.

Photo Credit: adolescente via Shutterstock

La entrada Trucos psicológicos para comer menos durante las fiestas aparece primero en Psicocode.



from Psicocode http://ift.tt/2iZjvuj
via IFTTT

domingo, 8 de enero de 2017

“Preocupaciones: No te preocupes, ocúpate”

Las preocupaciones son algo que nos acompaña a lo largo de toda nuestra vida, porque creemos que con ella podemos cambiar las cosas que nos hacen sufrir.

Nos preocupamos por una infinidad de cosas que rodean nuestra vida: nos preocupa nuestra salud, los hijos, el dinero, nuestro trabajo o la falta de él, la muerte, lo que puedan pensar los demás, envejecer y a veces nos preocupa, el no tener nada por lo que preocuparnos. Nuestra sociedad fomentan las preocupaciones, así cuando queremos a alguien decimos: “por supuesto que estoy preocupado por ella/el, es natural cuando quieres a alguien”, lo entendemos como forma de interés.

Y todo ello no sirve para nada: ni un sólo momento de preocupaciones logrará mejorar las cosas.

La Ambilalencia en la Toma de Decisiones

La preocupaciones no aportan nada. Debemos ocuparnos de nuestros problemas, no preocuparnos.

La mayoría de veces no nos damos cuenta que gran parte de nuestras preocupaciones se refieren a cosas sobre las que no tenemos absolutamente ningún control. Puedes pasarte el resto de tu vida preocupándote por el futuro, y por mucho que te preocupes no cambiarás nada.

La preocupación significa dar vueltas inútiles a un asunto, sin poner ningún tipo de solución, al contrario, provocando precisamente lo que no queremos que ocurra. Y así solemos pasarnos la vida preocupándonos por si estos ” y si…” se cumpliesen.

Veamos la diferencia cuando nos ocupamos y cuando nos preocupamos. Por ejemplo, ante la preocupación que: ” Y si tengo un accidente cuando me vaya de viaje”.

Tomar decisiones: La sensación de bloqueo

 

Cuando nos ocupamos:

  • Ponemos el coche a punto y lo revisamos antes de partir.
  • Descansamos y dormimos lo suficiente para poder estar despejados y tranquilos.
  • En el momento de salir nos ponemos el cinturón de seguridad y ajustamos los asientos y los espejos retrovisores.
  • Ya en carretera tomamos todas las preocupaciones posibles que estén bajo nuestro control: mantener una velocidad adecuada, respetar las señales de tráfico, parar para descansar cada dos horas, no hacer adelantamientos imprudentes, etc…

Si mantenemos todas estas precauciones es muy posible que lleguemos a nuestro destino sin ningún problema, ya que nos hemos ocupado de poner en práctica todas las medidas de seguridad que dependen de nosotros, que están bajo nuestro control.

 

Cuando nos preocupamos:

  • Ponemos el coche a punto y lo revisamos antes de partir, pero pensamos que algo falla, cualquier pequeño ruido nos pone alerta y pensamos que nos va jugar una mala pasada durante el viaje.
  • Ni descansamos ni dormimos lo suficiente porque pensamos que algo malo va a suceder, que vamos a tener un accidente, que el coche se va a romper, etc…
  • En el momento de salir nos ponemos el cinturón de seguridad y ajustamos los asientos y los espejos retrovisores, eso sí, con las manos temblorosas por nuestro miedo.
  • Ya en carretera nos ponemos en sobreaviso, vamos muy pendientes de lo que van haciendo los demás, si uno adelanta, si otro va muy deprisa, si otro se salta un ceda el paso, y por supuesto, no hay quien se salve de insultos y pitos; con ello nos ponemos nerviosos, tensos, irritados, nos molestan todas las conductas y por supuesto nuestra atención se desvía entonces pensando más en lo mal que lo hacen los demás que en lo que nosotros hacemos, poniéndonos en riesgo.

Como vemos, las preocupaciones no solucionan nada, más al contrario, nos impide y nos anula nuestras habilidades, nuestras destrezas, nuestros sentidos y nuestra serenidad.

La primera y peor consecuencia de la preocupación es que puede provocar aquello que tanto tememos, ya que, nos quedamos inmovilazados, paralizados, incapaces de buscar soluciones para mejorar las cosas. Además, la preocupación pone a una persona tensa y nerviosa. Llegando a enfermar somatizando en su cuerpo toda esa tensión.

Más de lo mismo: Cambiar para mejorar

 

En resumen:

  • “Debemos ocuparnos de nuestros problemas, no preocuparnos. Las preocupaciones no aportan nada”
  • “Ocuparnos” significa comprender los problemas y tomar con calma las medidas para solucionarlos
  • “Preocuparnos” significa dar vueltas enloquecedoras e inútiles a un asunto.

La entrada “Preocupaciones: No te preocupes, ocúpate” aparece primero en WebPsicólogos.



from WebPsicólogos http://ift.tt/2i6eYl3
via IFTTT

miércoles, 4 de enero de 2017

¿Sabes escuchar a los demás?

Escuchar no es lo mismo que oír, de la misma manera que ver no es lo mismo que observar. Dicho esto, ¿crees que sabes escuchar a los demás? Para algunas.

La entrada ¿Sabes escuchar a los demás? aparece primero en depsicologia.com.



from depsicologia.com http://ift.tt/2hRIZYR
via IFTTT

lunes, 2 de enero de 2017

Propósitos de año nuevo que te ayudaran a ser más feliz

El mes de enero se caracteriza todos los años por dos fenómenos globales que afectan a todo el mundo:

  • La cuesta de enero (porque en navidad hemos gastado más de lo que deberíamos).
  • Los propósitos para el nuevo año.

De momento para superar la cuesta de enero no tengo ninguna idea para ayudarte a superarla.

Pero respecto a los propósitos de año nuevo si tengo una idea que te puede interesar.

Más que una idea, es una propuesta para que te planteas la idea de propósitos de año nuevo de otra forma.

Los propósitos de año nuevo clásicos.

Es habitual que al empezar el año nos hagamos propósitos relacionados con la salud y con mejorar nuestra calidad de vida.

Dejar de fumar, adelgazar o hacer más deporte son ya unos clásicos en la declaración de intenciones al iniciar el año.

Y seamos sinceros, lo más normal en que en el mes de febrero no quede ni rastro de los nuevos propósitos que nos marcamos al empezar al año.

Por eso, te propongo cambiar la dinámica de propósitos de año nuevo incumplidos, por un juego de tres preguntas, que seguro que te vas a ser más útil y más fácil de cumplir.

Tres preguntas para empezar el nuevo año.

La idea es cambiar los propósitos de año nuevo por dedicar un poco de nuestro tiempo a pensar y responder tres preguntas que te van a ser útiles para saber quien eres, donde estas y a dónde quieres ir.

Las tres preguntas son:

  • ¿Qué fue lo peor del año pasado?
  • ¿Qué fue lo mejor del año pasado?
  • ¿Cuál es tu mejor propósito para el año nuevo?

¿Qué fue lo peor del año pasado?

Permítete uno minutos para recordar las cosas que no te gustaron del año pasado.
Tomate un café” con esos pensamientos, acepta que te han dolido, trata de aprender algo de ellos y despídete.

No nos gusta recordar lo malo que nos pasa, pero es necesario cerrar las heridas y aceptar lo que nos ha hecho daño para ser capaces de dejar marcha el dolor

No cargues tu mochila para el año nuevo con lo malo del año anterior.

¿Qué fue lo mejor del año pasado?

Trata de recordar lo mejor del año que despedimos.
Recuerda esos momentos donde fuiste quien te gusta ser, donde te comportaste como te gusta.

Recuerda a esas personas que te regalaron una sonrisa, te dijeron algo bonito y te ayudaron.

Y llena tu mochila para el año nuevo de todas esas sensaciones, personas y recuerdos que quieres que te acompañen durante el año que empieza.

Trata de construir tu yo futuro con las mejores sensaciones de tu yo pasado.

¿Cuál es tu mejor propósito para el año nuevo?

Haz un compromiso contigo mismo. Ni 2 ni 3 ni 10, simplemente uno.

Elije algo que este en tu mano, que te haga ser más feliz y ser mejor persona.

Busca un motivo para que 2017 sea un año memorable. Algo que, en el año 2025 digas “Fue en 2017 cuando…”

Y si ese compromiso tiene que ver con quien eres, en vez de como eres, mejor que mejor.

Algunas respuestas de los suscriptores de WebPsicólogos.

Estás mismas tres preguntas las hice por email a los suscriptores de WebPsicólogos justo el día 31 de diciembre.

Y les pedí que, si querían compartir sus respuestas me las enviaran y que las compartiría en un post.

Y como siempre que pedimos participación, hemos recibido multitud de emails con vuestras respuestas. Mil gracias.

Par no hacer un email post eterno, vamos a publicar las 4 primeras respuestas recibidas a las tres preguntas.

Respuestas de los suscriptores:

A la pregunta, ¿Qué fue lo peor del año pasado?

Diego:

Lo peor que me paso en este año y que me marcó por todo lo que después me sucedió fue vivir un Tornado (y no saber que iba a ser de mi en esos momentos; “viviré”?, “moriré”?) en la ciudad en la cual trabajo como docente junto a adolescentes.

Ello, junto a otras causas me llevaron a tener una recaída de ansiedad (hipocondriasis) generalizada que me afectó mucho a nivel personal, familiar, social y laboral. Gracias a TCC (terapia cognitiva conductual), Psiquiatra, familia y mucha voluntad personal estoy saliendo adelante.

Sonia:

Lo peor del año pasado ha sido quedarme en el paro. Tengo 38 años y he trabajado desde los 24 y no estaba preparada para estar sin empleo.

Liliana:

La gente desagradecida, falsa, mentirosa. Fuera de mi vida esa gente.

Miguel:

Aceptar que mi separación era definitiva. Aunque mi mujer se separó de mi hace más de un año, no fue hasta que le vi con una pareja nueva que acepte que no íbamos a volver.

¿Qué fue lo mejor del año pasado?

Diego:

Lo mejor fue conocer un grupo de adolescentes (estudiantes) excelente a todo nivel (no solo académico), ayudar en la reconstrucción del Instituto Educativo afectado por el Tornado y vivir-contar con  el apoyo de mi señora y ver como mi pequeña hija crece día a día.

Sonia:

Tener tiempo para disfrutar de mis hijas.

Liliana:

El amor de mi pareja, un hombre con mayúsculas, que hace todo lo posible para que yo sea feliz.

Miguel:

Aceptar que mi separación era definitiva.

Aunque por un lado ha sido lo peor que me ha pasado en 2016, a la vez ha sido lo mejor que me ha pasado porque me permite pasar página.

A la pregunta, ¿Cuál es tu mejor propósito para el año nuevo?

Diego:

Cambiar positivamente aspectos de mi personalidad que afectan algunas relaciones interpersonales. Sé que va a costar, pero lo voy a lograr!

Sonia:

Dedicar más tiempo a las cosas importantes y no preocuparme por las que no lo son.

Liliana:

Mi deseo para 2017, salud, tranquilidad, y acercarme más a Dios, enfocarme en ser mejor persona.

Miguel:

Atreverme a buscar nuevas relaciones sentimentales y dejarme llevar por mis sentimientos.

Hasta aquí las 4 primeras respuestas que hemos recibido.

Muchas gracias por contarnos vuestras respuestas y seguro que sois capaces de cumplir vuestro mejor propósito de año nuevo.

Y si a ti te apetece compartir tu respuesta a estas tres preguntas que sustituyen a los propósitos de año nuevo, tienes los comentarios a tu disposición.

Si te ha gustado este post, seguramente te interese el artículo 10 preguntas pata conocerte mejor a ti mismo

Aprende a combatir la ansiedaddescuento curso ansiedad

¿Qué aprenderás?

  • Qué es el estrés y la ansiedad
  • Cómo te está afectando
  • Herramientas conductuales
  • Herramientas cognitivas
  • Estrategias para gestionarlo
  • Un modelo de comportamiento saludable
  • A vivir sin ansiedad

Más información

La entrada Propósitos de año nuevo que te ayudaran a ser más feliz aparece primero en WebPsicólogos.



from WebPsicólogos http://ift.tt/2hLluT6
via IFTTT