Seguro que esta historia te suena… Por fin has acabado la carrera y ya tienes tu titulación en psicología. Además, has complementado tus estudios con un master, por lo que el siguiente paso natural sería empezar a ejercer tu profesión. Pero, entre la falta de experiencia de un recién titulado y el alto nivel de paro, no encuentras trabajo.
A muchos otros jóvenes, independientemente de la carrera profesional que hayan escogido, les ha pasado lo mismo. Es por ello que cada vez más profesionales se lanzan a la aventura de emprender su propio negocio.
Sin embargo, en la universidad te han enseñado a convertirte en un buen profesional, no a cómo dirigir un negocio. Si tu sueño o tu salida laboral pasan por abrir una consulta privada de psicología, los siguientes consejos te interesan.
La ubicación, aspecto clave
La ubicación de tu consulta es un aspecto clave y que difícilmente podrás cambiar una vez hayas realizado las reformas necesarias en el local que escojas. Algunos de tus vecinos podrían convertirse en tus primeros clientes, por lo que deberás investigar la demografía de cada uno de los barrios de tu ciudad.
En función de tu especialidad, escoge un barrio o calle apropiado. Por ejemplo, si piensas dedicarte a la psicología infantil, deberías buscar una calle en la que haya un colegio o instalarte en un barrio de edificios relativamente nuevos, habitados por parejas jóvenes con hijos.
Marketing sin que te cueste una fortuna
El boca a boca, un rótulo a pie de calle y las tarjetas de visita son métodos promocionales que se han utilizado toda la vida. Por un presupuesto muy reducido puedes conseguir un impacto mucho mayor en tu clientela potencial utilizando las redes sociales e internet.
Crea, o paga a una empresa especializada para que te la cree, una página web. No te limites a informar de tus servicios y dirección, crea contenidos interesantes y explica de manera práctica cómo puedes ayudar a tus clientes. Sé activo en las redes sociales y utilízalas para acercarte al público, tal vez aconsejando de manera gratuita y seguro que, muy pronto, alguno de tus lectores acaba convirtiéndose en paciente.
La seguridad es una prioridad
La inversión que has realizado para habilitar y poner en marcha tu consulta no puede estar sujeta a imprevistos. Asegúrate de contratar un seguro de contenido que cubra incidentes de todo tipo tales como robos, incendios o inundaciones. Como siempre se ha dicho, “prevenir es curar”, así que lo más recomendable es que tu consulta disponga, además, de su propio sistema de alarma y seguridad.
Existe una amplia variedad de sistemas de seguridad y debes asegurarte de escoger el producto que mejor se adapte a tus necesidades. Consulta con cualquier conocido que se haya instalado alguno, o revisa los comentarios de opiniones Securitas Direct para familiarizarte con las diferentes prestaciones que ofrecen y asegurarte de que escoges correctamente.
Complementa el trabajo con el estudio
La formación continua es un factor clave para tu crecimiento como profesional. Complementa tus prácticas y la experiencia que vas a ir adquiriendo en el día a día con cursos especializados que te den un valor extra como profesional. Trabajando por tu cuenta perderás la oportunidad de aprender de otros compañeros más experimentados, así que deberás compensarlo con un poco de estudio extra.
Emprender tu propio negocio y abrir una consulta privada de psicología puede ser un sueño convertido en realidad. Sin embargo, y como cualquier otra cosa que hacemos por primera vez, es también un camino sembrado de dudas. Con estos sencillos consejos esperamos haber llamado tu atención sobre algunos aspectos a los que debes prestar especial atención.
Photo Credit: Consulta de Psicologia via Shutterstock
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