¿Qué es el ciclo menstrual?
Desde el punto de vista psicológico, el ciclo menstrual tiene una relación de causa-efecto con las emociones de las mujeres que lo experimentan.
Por otro lado, para la biología el ciclo menstrual es el sangrado periódico que tiene cada mujer desde la menarquía (primera menstruación) hasta la menopausia (última menstruación). De acuerdo a la media de nuestra población, la edad de inicio de la menstruación se da a los 12 años, y el fin se da alrededor de los 52 años. Entonces, si vamos a atravesar por este ciclo menstrual un promedio de 40 años ¿por qué no analizarlo y comprenderlo?
Al culminar esta lectura, podrás saber claramente cómo las hormonas que intervienen en cada fase del ciclo menstrual influyen en tu estado de ánimo y conducta. Despertándose el interés en investigar en ti misma, y una vez lo hagas, podrás prepararte con una actitud positiva y motivadora para cada una de estas fases. Desarrollando así, tú inteligencia emocional y femineidad respecto a este tema.
¿Cuál es el punto de partida del ciclo menstrual?
A sus marcas, listas o no… empieza la pubertad: Por todo el cerebro es liberada la proteína Quispetina, el hipotálamo es el culpable. Esta proteína desata la producción de las hormonas estrógeno y progesterona por todo el organismo. ¿Consecuencias? Biológicamente, despierta la función ovárica ocasionando la aparición de los caracteres sexuales secundarios. Es también en este momento cuando se producen cambios psicológicos como impulsividad y variaciones repentinas en el estado de ánimo. En síntesis, cuerpo y mente pasan de niña a mujer con la menarquía.
En el proceso de menstruación intervienen: diferentes hormonas, la glándula pituitaria, el cerebro y los órganos sexuales de la mujer (útero, trompas de Falopio, vagina, ovarios y cérvix).
A continuación, se destaca un gráfico con los niveles de producción de algunas de las hormonas que interactúan en el ciclo menstrual (el día 1 inicia con el sangrado). ¿Notas cómo varían las ondas acorde al día del ciclo?
¿Es necesario el ciclo menstrual?
Probablemente al leer esta pregunta algunas pensarán en los aspectos patológicos que se relacionan a la menstruación como el dolor, la debilidad y las molestias, seguido de los prejuicios que genera la sociedad sobre este tema.
Es exactamente a partir de este punto, en donde comenzaremos a entender la trascendencia del ciclo menstrual en nuestro organismo.
¿Sabías que durante nuestra vida atravesaremos aproximadamente por 480 ciclos menstruales?
Existe un antes, un durante y un después del ciclo menstrual, y cada una de estas tres fases son fundamentales para producir cambios hormonales, físicos y psicológicos significativos en el organismo de las mujeres.
El ciclo menstrual es necesario para la reproducción y supervivencia de la especie, ya que debido a este, existe el periodo de fertilidad en las mujeres. La ginecóloga Northrup (2016), afirma que el número de óvulos es finito:
“Al nacer una mujer presenta dos millones de óvulos, pasando la etapa de pubertad le quedan 40,000 óvulos, y durante el periodo de fertilidad serán liberados 500 óvulos aproximadamente”.
No olvidemos que conocer nuestro ciclo menstrual, hará que el juego de la ruleta rusa a quedar embarazadas se quede sin balas. Siendo entonces el periodo un gran aliado de la planificación familiar.
Pensemos en salud, resulta que la actividad hormonal cíclica es considerada como un barómetro de salud para distintas ramas de la medicina, acorde al libro “Luna roja” escrito por Miranda Gray (2005):
“La menstruación actúa como un sistema de auto-limpieza mensual, protegiendo a nuestro aparato genital femenino”.
La mujer en edad fértil, presenta un pH vaginal que varía a lo largo del ciclo. Rojas (2014), indica que conociendo cómo varían los valores del pH en una mujer sana, se podrán prevenir, identificar y corregir ciertos desequilibrios, como por ejemplo: infecciones.
“La sangre menstrual contiene valiosas células madre, proteínas, vitaminas, hierro y otros minerales”. Mendez (2016).
Recientes investigaciones, sugieren que el fluido menstrual contiene células madres auto renovables. El encargado de uno de estos estudios, Xiaolong Meng, afirmó lo siguiente durante una entrevista:
“Tenemos muchos problemas con los actuales métodos para lograr células madre, como las de médula ósea, y utilizarlas para tratamientos, ya que pueden ser rechazadas por el paciente y tienen un potencial limitado para reproducirse. Es posible que hayamos encontrado una vía para superar estas dificultades mediante el uso de células de sangre menstrual”. Citando a López (2007).
Otro tema que está siendo cada vez más desarrollado es la menstruación desde el punto de vista espiritual, para la Dra. Northrup (2016), la energía menstrual es no solo una etapa para quedar embarazadas, sino también una etapa para gestar o crear ideas. Esta “Creatividad” debe tener un medio de canalización, caso contrario podrían desencadenarse problemas relacionados con lo opuesto, que serían conductas destructivas. Esta rama busca enseñar a las mujeres a gestionar su naturaleza cíclica de una forma natural, intuitiva y consciente.
Psicológicamente, cuando una mujer presenta un autoconocimiento sano, su autoestima, sexualidad y empatía con los demás se desarrolla óptimamente. Y, viceversa.
Aparte de lo ya señalado, el ciclo menstrual es culturalmente importante porque resulta ser uno de los mayores símbolos de femineidad para aquellas que entendemos y valoramos nuestro periodo.
¿Cuánto tiempo dura un ciclo menstrual?
El ciclo menstrual se refiere a la cantidad de tiempo entre un periodo y otro, el ciclo se cuenta desde el inicio del sangrado hasta un día antes de la siguiente menstruación. El periodo tiene una duración que oscila entre 21 y 35 días, teniendo una duración promedio de 28 días.
El objetivo de este tema es que tengas definida la duración y tu tipo de ciclo analizando los meses precedentes, para sintonizarnos en lo que viene más adelante. Se dice que un ciclo es un periodo regular cuando existe un patrón de días entre el inicio y el fin de un periodo. Por otro lado, cuando existe una variación significativa en la duración de tu periodo, se le conoce como periodo irregular.
¿En algún momento de tu vida el inicio de tu periodo se ha aproximado al periodo de tus mejores amigas por pasar tiempo con ellas? La primera teoría que responde a esta interrogante, fue la elaborada por la psicóloga Martha McClintock (1971), la cual postula que al relacionarnos íntimamente con personas de nuestro mismo género, las feromonas emitidas por nuestros organismos podrían conducirnos a la “Sincronía Menstrual” o a la también llamada “Regulación social de la ovulación”. Cabe mencionar que esta teoría continúa siendo validada por científicos biólogos.
Estás por ingresar al punto clave de este artículo, te invito a que continúes leyéndolo ¡vamos a cambiar la percepción negativa que tenemos nosotras mismas acerca de nuestro periodo!
Diario Menstrual
¿Quién no ha escrito un diario de anécdotas en algún momento de su vida? Pues bien, para tratar de comprender de modo didáctico el ciclo menstrual, haciendo un autoanálisis de seis meses y basándome en fundamentos empíricos para validarlo, expongo los principales aspectos biológicos y psicológicos que se involucran en este proceso día a día.
La tarea para ti es descubrir cómo funciona tu cuerpo y validar en qué días se dan los cambios que describo a continuación por más de tres periodos para poder identificar patrones.
Estoy segura que una bitácora menstrual, ya sea mediante un diario escrito o mediante una App para móviles, será de gran de ayuda. A mí me ha servido increíblemente la App gratuita “LoveCycles Ciclo Menstrual”, la cual te permite llevar un registro detallado del día de inicio del periodo, de los principales síntomas, peso, molestias, estados de ánimo, calambres, antojos, entre otros. Esta App destaca de otras porque luego del primer mes de tenerla te brinda predicciones para los siguientes ciclos, seguidas de consejos diarios acorde al día del ciclo en el que te encuentres.
Te invito a leer lo que suele ocurrir durante el ciclo menstrual, teniendo en cuenta que la descripción dada se basa en un ciclo regular de 28 días.
DÍA 1: Primer día de sangrado
El sangrado es lo que marca el primer día del ciclo menstrual y suele denominarse periodo o regla.
Para responder a la siguiente interrogante: ¿Cómo se produce este sangrado?, los niveles de estrógeno disminuyen y por consecuencia se reduce la cantidad de sangre que recibe el endometrio, ocasionando que se desprendan algunos vasos sanguíneos pequeños, y que junto a los restos de tejido y al óvulo sin fertilizar sean expulsados a través de la vagina y del cuello uterino (cérvix), produciéndose así un líquido color rojo brillante.
¿Sabes por qué sangramos en periodos variables de tiempo y de forma fragmentaria? Esto se debe a que la descamación corresponde a distintas zonas del endometrio. A continuación puedes visualizar una imagen del engrosamiento del endometrio y el sangrado:
A partir del día uno, hasta el último día de sangrado el pH se mantendrá neutro.
El científico Valls (2006), refiere que la hormona estrógeno afecta en la excitabilidad, estimulación y tonificación (efecto antidepresivo) del sistema nervioso. Así mismo, se ha demostrado que el estrógeno incrementa los niveles de neurotransmisores en el cerebro: químicos que incluyen endorfinas, encefalinas y serotonina (componente que influye en las emociones y en el apetito). Pues bien, ¿Qué pasa con nuestras emociones cuando el estrógeno disminuye? Se reduce la producción de los químicos mencionados, lo que provoca cambios en el estado de ánimo de la mujer, tales como sentimientos de depresión, ansiedad e irritabilidad. Hyde (1991).
Parlee (1983) comprueba en su estudio sobre menstruación y sensibilidad sensorial, que la visión, el olfato, el oído, el gusto y el tacto disminuyen en esta fase. Hecho corroborado por la investigación efectuada en México por Landau (2010), la cual demuestra una disminución significativa en los niveles de procesamientos sensoriales.
La sustancia estrogénica participa activamente en el metabolismo de las grasas, por lo que bajos niveles estrógenicos ocasionan el incremento del colesterol malo en el organismo femenino.
¿Interesante, cierto?, y aún vamos en el día uno: “Le moment de la lune”.
Por otro lado, diversas investigaciones han determinado que los estrógenos son los responsables de actuar sobre los receptores localizados en las neuronas que regulan el dolor. Entonces, al bajar estos, algunas mujeres sufren de “Migraña menstrual”, Valls (2006). Se puede visualizar un gráfico con los días de migraña de mayor frecuencia:
Pero no es todo, la disminución de estrógenos también conlleva al descenso del estradiol, principal hormona sexual, por lo que se produce un declive en la libido sexual a partir de este día.
Paralelamente, ¿Qué otros cambios hormonales ocurren durante este primer día de sangrado? Disminuyen significativamente los niveles de las hormonas progesterona, estimulante del folículo y luteinizante.
La progesterona natural tiene un efecto armonizador estimulando la sedación y el sueño, y colaborando en eliminar el exceso de líquidos, de irritabilidad y la tensión nerviosa. Queda claro entonces, que con los niveles disminuidos de progesterona, ocurriría lo contrario, es decir que podrían presentarse irritabilidad, tensión y alteraciones en el estado de sueño.
¿No sientes un sueño reparador cuando estás en tus días? No pasa nada malo contigo, por lo expuesto, y acorde a la National Sleep Foundation (2016), es probable que el sueño de mala calidad ocurra al comienzo del ciclo menstrual. Buenas noticias, esto sólo durará unos cuantos días, acéptalo y busca un ambiente agradable y relajante fuera de distractores para mejorar tu calidad de sueño, si es tu caso.
Por lo señalado, es comprensible que durante este día presentes párpados cansados, ya que, a consecuencia de la disminución del estrógeno se reduce la producción de colágeno y de elastina, datos rescatados del estudio de la Division of Psychoneuroendocrinology, Max-Planck-Institute of Psychiatry, Munich. Continuando con los resultados del estudio mencionado, y dado que durante el sangrado se reducen los niveles de humedad, los labios tendrán mayor tendencia a secarse durante tu periodo.
Este día uno viene acompañado también de una mayor sensibilidad en los senos.
Por último, un estudio efectuado en Madrid por Dreher y col. (2007), sobre como las hormonas sexuales en las distintas fases del ciclo menstrual fomentan ciertas conductas relacionadas con la satisfacción, indica que durante esta fase de sangrado existiría mayor vulnerabilidad al abuso de sustancias.
¿Te sientes identificada con algunos de los cambios descritos? De ser cierto, sugiero continúes con la lectura de este artículo, ya que comprenderás que cada cambio tiene una consecuencia en tu estado de ánimo.
DÍA 2: Segundo día de sangrado
Estoy segura que los has sentido en algún momento de tu periodo, pero ¿sabes realmente qué son los calambres menstruales? Los calambres son aquellos dolores leves y constantes que se concentran en la parte inferior del abdomen, de la espalda y caderas. Dado que, los sentimos mensualmente, aunque en distintas intensidades, podrías preguntarte ¿por qué causan dolor estos calambres? Te explico, para que el endometrio elimine el tejido y se produzca el sangrado, la hormona prostaglandina, ocasiona que el útero contraiga y relaje sus músculos, comprimiendo sus vasos sanguíneos y limitando su flujo de oxígeno y de sangre, esto es lo que provocaría el dolor.
Budoff (1981), indica que las prostaglandinas provocan también una sensibilidad mayor en las terminaciones nerviosas, entonces se puede inferir que mientras más prostaglandinas produzca nuestro organismo, más fuertes serán los dolores. Adicionalmente, los calambres suelen ser ocasionados por la dilatación del cérvix para dar salida al sangrado.
Al ser el segundo día, considerado para la mayoría de las mujeres como el día de mayor sangrado, se deduce que existiría mayor actividad por parte del útero, lo que ocasionaría un mayor riesgo en la aparición de calambres menstruales. Por este motivo considero que este punto es fundamental para conocernos y para poder buscar estrategias que minimicen el impacto de los calambres en nuestro organismo, hecho por el que continuaré ahondando en el tema.
Luego de leer lo anterior, seguro estarás preguntándote ¿qué estrategia aplicar para minimizar estos dolorosos calambres?, usualmente estos calambres son tratados con medicamentos prescritos (analgésicos, paracetamol, pastillas anticonceptivas, suplementos en vitamina D, etc.).
Otras prefieren tratamientos naturales como masajes y acupuntura. Bianchi (2011).
Cabría preguntarse, ¿Por qué algunas optamos por colocarnos compresas calientes en el abdomen o por darnos una ducha caliente tratando de mitigar el dolor de los cólicos?, esto tiene un fundamento científico y se debe a que el calor contribuye al aumento del flujo sanguíneo, por ende el dolor se reduciría.
Continuando con las sugerencias para aliviar los calambres menstruales, Rossi (2005), reconocido ginecólogo estadounidense, recomienda realizar ejercicio físico para aliviar dichos cólicos. Es importante qué consultes con un especialista acerca de la rutina de ejercicio que te beneficiaría para estos días, los ejercicios suaves pueden aliviar los síntomas estimulando la circulación sanguínea y liberando endorfinas (ejercicios aeróbicos como caminar, montar bicicleta o nadar). Del mismo modo, Sampath (2015) sugiere practicar algunas posturas de yoga, especialmente aquellas que estiren los músculos de espalda, ingle, pecho y abdominales.
Pérez (2012), refiere que una dieta alta en magnesio y beber abundante agua aliviaran significativamente el malestar. Continuando con la línea alimenticia me dediqué a investigar en distintos blogs de tratamientos dietéticos, y el ingrediente más destacado es la infusión de té de jengibre. Ahora, si deseas mayor información sobre estas técnicas te invito a revisar la bibliografía que se encuentra al final del artículo.
Ya habiendo detallado el proceso de la aparición de calambres, es importante explicar en este apartado el motivo por el que a veces expulsamos coágulos, el cual se debe a la alta frecuencia de las contracciones uterinas que por su proximidad de aparición no permiten que la sangre se diluya antes de salir.
Por último, retomando el tema de las prostaglandinas, en algunos casos su incremento excesivo podría llegar hasta los intestinos, causando que el tejido muscular del intestino delgado se contraiga y provoque diarrea.
Otras posibles molestias ocasionadas por la producción de prostaglandinas son los dolores de cabeza, las náuseas y los vómitos. Estas últimas características son parte del ruido que envía nuestro organismo para que nos tomemos un tiempo a solas, un tiempo de meditación, de lidiar con nuestras emociones, de conocer más que si nos gusta y que no toleramos en nuestra vida… ¡Sólo tienes que escuchar y aprender a interpretar!
Día 3 y 4: Tercer y cuarto día de sangrado
Aún en estos días, el sangrado permanece siendo de color rojo brillante. Y, continuando con la mayoría de características descritas previamente, en el tercer y cuarto día se suelen experimentar las consecuencias por la pérdida de hierro ocasionada por el sangrado. Vila y Quintana (2008), menciona que la pérdida normal de hierro cuando no está presente el sangrado es de 1 mg. al día, y que durante el sangrado la pérdida es de 1.4 a 3.2 mgs. diarios, ¿notaste la diferencia?
Los calambres suelen continuar en estos días, y aunque sé por experiencia propia que, estos son dolorosos, tengo que resaltar que esto significa que nuestros cuerpos funcionan como es debido, y esperanzadoramente para muchas en estos días la intensidad de dolor habrá disminuido notablemente.
Día 5: Quinto día de sangrado
Generalmente, a partir de este día el color del sangrado cambia del rojo brillante al marrón opaco. Así mismo, la cantidad de sangrado y los calambres casi desaparecen.
Las mujeres que sufrieron de la migraña menstrual en los días previos, recibirán este quinto día sin dolores de cabeza.
DÍA 6: Último día de sangrado
Por lo general, el periodo dura entre cuatro y seis días dependiendo de cada organismo. Al llegar este día, el sangrado esta por culminar, hecho ocasionado por el aumento de los estrógenos. A causa de lo mencionado, podrás corroborar como a partir de este momento tu energía incrementa. Algo semejante ocurre con la libido sexual que comienza a normalizarse.
Durante estos primeros días, la temperatura corporal varía entre 36.1º C y 36.7º C.
La cantidad normal de flujo menstrual durante el periodo es de un cuarto de taza aproximadamente.
Por último, dado que la ansiedad y los antojos disminuyen, se considera a este punto como ideal para iniciar una dieta alimenticia.
DÍA 7 AL 12: Fase de preovulación o Fase folicular
Para muchas, el día siete es el primer día libre de un período, y como el organismo no descansa, a partir de este día se inicia nuevamente el proceso de desarrollo folicular. López (1983), lo explica del siguiente modo: Primero, el hipotálamo produce sustancias que tienen como misión actuar en la hipófisis, ocasionando que esta produzca la hormona folículoestimulante (HFE) y la hormona luteinizante (HL). Por último, las hormonas producidas hacen que el ovario segregue estrógenos (estradiol), los cuales ocasionan que crezcan dentro de tus ovarios pequeños folículos que contienen óvulos.
Paralelamente a los cambios descritos en el día siete, comienza a engrosarse el endometrio (membrana que en caso se dé la fecundación serviría para hospedar al óvulo).
Queda claro entonces que en este momento los niveles de estrógeno comienzan a elevarse, los niveles de la hormona testosterona son aún mínimos, y la progesterona continua ausente. El pH vaginal sigue siendo ácido, varía entre 4.0 y 5.0.
Ya entendida esta fase desde el punto de vista biológico, procedemos a preguntarnos ¿qué sucede con nuestras emociones durante la fase folicular? Imagina el último día de clases o de trabajo antes de salir de vacaciones, proyecta la sensación percibida al salir de una ducha caliente: frescura, renovación, alegría y optimismo, son las principales características de estos días.
A partir de esta fase la apetencia sexual incrementa notablemente, según información del Instituto de Salud Reproductiva de la Universidad de Georgetown, las probabilidades de embarazarte son de 5% en los días siete y ocho, de 15% en los días nueve y diez, y de 35% el día once y doce. Arévalo, M., Jennings, V., Sinai, I. (2012).
Dreher y col. (2007), descubren que a partir del día once o doce, se activan con más intensidad unas zonas del cerebro relacionadas con el sistema de recompensa, esto quiere decir que sentirás mayor satisfacción antes de tener cualquiera sea el estímulo recompensa (por ejemplo: disfrutar de ir a probarte ropa sin necesidad de ir a comprarla; trabajar en metas sin necesidad de resultados inmediatos, el juego sexual previo, cocinar para alguien más, actividades altruistas, etc.).
Al recopilar información para este artículo, encontré el Blog de Erika Irusta (2016), “El camino rubí”, te recomiendo altas dosis diarias de lectura del mismo, ya que se trata de la única pedagoga especialista en el ciclo menstrual. Luego de leerla, procedo a citar textualmente la interpretación de Irusta respecto a la fase preovulatoria:
“Se da un momento mágico de salir de la madriguera y ver el mundo con las gafas de arco iris. Tenemos fuerza, energía, chispa. Fiesta del estradiol: Corretea, juguetón, por nuestras venas y por nuestro cerebro dejándonoslo bien abonado, con lo que tenemos la Súper Fuerza para parar trenes, salir a correr, cumplir los propósitos del año, estudiar, trabajar, leer, ir-venir-salir, explotar y volvernos a recomponer”.
Concretamente, esta fase culmina con el inicio de la fase de ovulación.
DÍA 13 al 15: Fase de ovulación
Las mujeres somos capaces de producir la célula más grande del cuerpo humano: “El óvulo”, el cual mide aproximadamente 0,14 milímetros.
¿Qué cambios biológicos se dan en nuestros organismos para propiciar la aparición de esta fase?, Valls (2006) expone que aproximadamente en el día 13 el óvulo culmina su maduración, seguido a ello, la hipófisis produce un brusco aumento de la hormona luteinizante (hormona responsable de la ovulación). Este óvulo maduro tiene dos posibles destinos, el primero sería cruzarse con algún espermatozoide en un lapso de 12 a 36 horas de ser expulsado y que sea fecundado, dando lugar al embarazo. Mientras que el segundo destino sería que continúe su camino solitario por las trompas de Falopio y que sea desterrado posteriormente, empleando como medio de transporte a la menstruación.
A partir del día 14, a modo de evitar que el endometrio se engrose en exceso y se produzca una hemorragia excesiva, el organismo continuará produciendo progesterona, la cual a partir de este momento irá en ascenso.
Al ser considerada la fase más importante del ciclo femenino, necesitas identificar con la mayor precisión posible su inicio, ¿una pista? En general, la ovulación suele ocurrir entre el día 12 y el 16. Ten en cuenta que por las variaciones en los niveles de progesterona ocurrirán cambios en la temperatura corporal, ¿cuándo? Aproximadamente a mitad de tu ciclo subirá la temperatura corporal de 0.2º C. a 0.5º C., esto sugiere que la ovulación culminó.
¿Cómo hacer el cálculo? Identifica el día en que tu temperatura incrementa, réstale tres días y ese será el inicio de tu ovulación, para esto te sugiero llevar un registro de tu temperatura al despertar mínimo por tres meses consecutivos, de este modo calcularás tu fecha de ovulación, dime… ¿ya alistaste el termómetro?
Además de lo señalado, existe otra evidencia física que tu organismo va dejándote, que es el flujo vaginal, el cual incrementa a causa de los elevados niveles de estrógeno y cambia a una textura más pegajosa y elástica, muchas la asocian a la clara de huevo. Este flujo tiene la misión de facilitar el recorrido del esperma hacia el óvulo.
En algún momento de esta fase también tendrás una secreción de color amarillento y de consistencia viscosa, ¡esto es completamente sano! Se trata de la expulsión del folículo en el que habitaba el óvulo, denominado “cuerpo luteo”.
Analizarte servirá para que puedas anticiparte a estos sucesos y prepararte. Por lo señalado, continúo mencionando algunas consecuencias de esta fase, en la cual posiblemente sientas dolor ovárico, el cual se deberá a la ruptura de la pared ovárica y a la liberación del gameto maduro. Otro síntoma son los pies hinchados y adoloridos, por la cantidad de terminales nerviosas que se encuentran en ellos.
El alto pico de estrógeno y la influencia de la hormona oxitocina en esta fase ocasionan que se eleve la libido sexual. Recuerda que es la fase perfecta para tener relaciones con mayor oportunidad de quedar embarazada, con el más alto porcentaje (35% de éxito) a comparación de otras fases, esto según información del estudio efectuado por Arévalo, M., Jennings, V., Sinai, I. (2012).
Distintos estudios han descubierto el fascinante poder de esta fase, por esto continuo contándote sobre las principales investigaciones que encontré en mi ampliación del conocimiento femenino:
Los cambios hormonales que afectan el hipocampo ocasionan que nuestra memoria evolutiva influya en las decisiones que tomamos, ¿eso quiere decir que en esta fase, instintivamente estaremos condicionadas a buscar la formación de una familia? La respuesta es afirmativa. Es más, Dreher y col. (2007), desde su perspectiva evolutiva, señalan que:
“El aumento de disponibilidad, receptividad y deseo que tienen lugar durante la ovulación suceden para favorecer la procreación”.
Eso no quiere decir que todas tengamos la meta de hacerlo, pero se podría despertar inconscientemente en nosotras una creciente atracción por los hombres considerados como más “viriles” en estos días¸ es decir por aquellos que presentan un tono de voz más grave, que son musculosos, con rasgos faciales más duros y que, en general, sean sexualmente más atractivos; características que sugerirían a nuestro gen evolutivo que estos hombres son sumamente fértiles y que presentan mejores genes para garantizar la descendencia. Fíjate si en estos días te atrae más el prototipo de hombre mencionado.
Y, ¿qué ocurre en tus días fértiles si ya tienes pareja? Rodriguez (2013), constata en su estudio, que los sentimientos de la mujer variaran significativamente en esta fase acorde al grado de atracción sexual y física que perciba hacia su pareja estable.
Además de lo señalado, tu cerebro conspirará para que durante estos días tu cuerpo se prepare para “hacerte lucir más atractiva”, ¿cómo? En estos días tu pelo brillará más, tu piel se verá más suave, desaparecerá la hinchazón del abdomen, y en general tus emociones harán que te percibas más linda que nunca. Personalmente, en esta fase cambio hasta mi forma de vestirme y de maquillarme, y es que… ¡Te dan ganas de lucir más espectacular que nunca!, sumémosle a lo señalado el olor que emites cuando ovulas y una voz más aguda, para concluir que en estos días definitivamente no pasarás desapercibida.
Existe la creencia de que las mujeres durante la fase de ovulación intensificamos el sentido olfativo, ¿hay realmente algo de cierto en esto? Los hallazgos de la investigación efectuada por McNeil (2013); validan esta creencia al demostrar que las hormonas en la ovulación agudizan el sentido olfativo, de manera que promueven la reproducción:
«La capacidad de identificar ciertos aromas aumenta cuando la probabilidad de procrear aumenta».
Por el incremento de las fluctuaciones de estrógeno, que ocasionan a su vez mayor producción de serotonina, esta fase es la de mayor energía para ti y la capacidad de decisión y de iniciativa se vuelven fieles compañeras.
Así mismo, las altas concentraciones hormonales, influyen en el hipocampo afectando positivamente en el proceso de aprendizaje y memoria:
“Durante la ovulación las mujeres alcanzarán su mayor rendimiento intelectual”. Rosenberg y Park, (2002).
Por todo lo señalado, este punto en el calendario menstrual es el más intenso hormonal y emocionalmente hablando, y mi favorito.
DÍA 16 al 22: Fase de Postovulación
En este momento continúan elevados los niveles de estradiol y progesterona y por ende, algunas de las consecuencias mencionadas anteriormente (libido sexual, alta capacidad de rendimiento intelectual, etc.).
Entonces, ¿qué diferencia a esta fase de la anterior?
“Los tres primeros días de esta fase (día 16, 17 y 18) tu probabilidad de embarazo bajará a 15%, y continuará disminuyendo, tanto así, que los siguientes días (19, 20, 21 y 22) la probabilidad de fertilidad será de 1%”, datos recopilados del estudio efectuado por Arévalo, M., Jennings, V. y Sinai, I. (2012).
Debido a que en estos días la progesterona alcanza su punto más alto, podrías sentirte más somnolienta.
Así mismo, a partir de esta fase, el moco cervical se convierte en menos denso, y la temperatura corporal asciende (37º C.).
Debido a la acción de las hormonas, el cuerpo tiende a retener líquido. El estrés o factores medioambientales podrían ocasionar la producción en exceso de estrógenos o en escasez de progesterona, lo que causaría mayor retención de líquidos y podría desencadenarse una subida de dos a tres kilos de peso.
Adicionalmente, durante estos días se podría percibir un leve incremento de ansiedad.
Todo lo mencionado nos motiva a querer descubrir más cambios físicos y emocionales relacionados con las fluctuaciones hormonales, y viceversa.
DÍA 23 al 28: Fase premenstrual
En esta última semana previa a la menstruación los estrógenos y la progesterona disminuyen notablemente, y el pH es ácido (entre 3.8 y 4.2).
Muchas no tendrán molestias significativas durante esta última fase, sin embargo, para las que las que si las tienen, considero sumamente importante identificarlas. Esto con el objeto de que contemplemos a esta fase como la pausa que requerimos en nuestras vidas. Ten en cuenta que si logras traducir las señales que te brinda tu organismo aprenderás cada día más de ti misma.
¿Sabes qué es el Síndrome Pre – Menstrual?, pues resulta que en 1931 el médico Robert Frank, estudió y posteriormente englobó los síntomas físicos y emocionales previos a la menstruación, creando el término “Síndrome Pre-Menstrual” o “SPM”. Actualmente se ha determinado que se trata de un patrón que afecta casi al 75% de las mujeres menstruantes.
A continuación detallo los síntomas físicos que conforman este síndrome: Disminuye la energía física, sensación de fatiga, dolores de cabeza, problemas de sueño, aumento de grasa en cabello y piel, dolores en los pechos y músculos, incremento de peso, dolor e hinchazón abdominal, uñas quebradizas, variaciones en el apetito, estreñimiento, etc. Voelckers (1993).
Por otro lado, en síntomas emocionales encontramos que la mujer se siente ansiosa, deprimida, irritable, tensa, dubitativa, autocrítica, hostil, con cambios repentinos en el humor, autoestima disminuida, y con dificultades para concentrarse y retener información.
Cabe mencionar que este síndrome se da a un nivel moderado, permitiendo que la mujer continúe con sus actividades normales. Pero, ¿qué ocurre cuando los síntomas mencionados son más intensos y afectan significativamente en las relaciones personales, sociales y laborales de la mujer?, esta pregunta ha sido evaluada y respondida por Asociación Americana de Psiquiatría “APA”, mediante la última versión del Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales “DSM V” que se encuentra vigente desde el 2013. En donde se ha incluido por primera vez al “Trastorno Disforico Premenstrual”, el cual afecta a un 3% – 6% de las mujeres menstruantes. Este trastorno se centra principalmente en los síntomas emocionales que interfieren significativamente en la vida de la mujer y que desaparecen al culminar la fase pre-menstrual, forma parte de los trastornos depresivos.
Por todo lo señalado, nuevamente hago hincapié en que se trata de la fase menstrual con mayores síntomas negativos, los cuales son un llamado a descansar, a poner un alto en la rutina y estrés diario y a ensimismarte en ti misma. El objetivo es que aprendas de ti y que busques estrategias para cuidarte… ¡Aprende a cuidarte!
Conclusiones
Debemos tener en cuenta que cada mujer es un mundo, y que no existe una sola regla o norma fija para los estados de ánimo durante el ciclo menstrual, por ese motivo espero que este artículo te motive a continuar investigando en ti misma.
Si logras conocerte, mejorará tu autopercepción respecto a este maravilloso ciclo. Escucha tu voz interior femenina para comprender cómo afecta la menstruación a tu cuerpo y a tu mente.
¡Qué gusto me da que me hayas leído!, espero haber incrementado tu curiosidad sobre este proceso y que continúes investigando en ti misma.
Ten en cuenta que muchos de nuestros miedos y molestias disminuyen conforme la ignorancia lo hace, y que lamentablemente de pequeñas no nos enseñaron a estudiarnos a nosotras mismas, no permitas que el ciclo se repita con nuevas generaciones:
Acorde a Jurgens y Powers (1991), las creencias y tabúes sobre la menstruación pueden afectar la imagen corporal, el cuidado médico, la autoestima, la percepción de enfermedad y bienestar, y la sexualidad.
Por otro lado, si eres hombre y te diste el tiempo de leer este artículo, estoy segura que habrás ingresado por unos instantes a la mente femenina, y que tendrás más claro en que consiste este proceso, probablemente crecerá tu empatía con nosotras.
Para terminar te sugiero ver el documental “La luna en ti” de Diana Fabiáno, y leer el cuento sobre sexualidad, placer y sobre el ciclo menstrual: “El tesoro de Lilith” de Carla Trepat, continúa investigando…
Bibliografía
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